La televisión paga sobrevive al ajuste de las familias puntanas
A pesar de los tiempos que corren y que son duros desde el punto de vista económico, el consumo de TV paga no retrocedió, sino todo lo contrario. El servicio por cable en el primer semestre del año mantuvo las suscripciones y, en el caso de la TV satelital, se produjo un crecimiento del 100%. El recorte en la economía hogareña pasa por otro lado: redujeron las salidas a comer, compran segundas marcas en ropa y en alimentos, pero la “pantalla chica” es sagrada. Al mismo tiempo, Netflix se abre paso y gana terreno esencialmente a partir del público joven.
Más allá de los aumentos constantes en el abono, no hubo una reducción de clientes, señalaron desde las empresas que operan en la ciudad de San Luis, las cuales prefieren mantener en reserva la cantidad de usuarios que poseen.
El segmento de clientes de DirecTV fue el que más creció en los últimos años, empujado fundamentalmente por las miles de viviendas sociales que se construyeron en los últimos años en la provincia. La proliferación de las antenas, de fácil instalación, se observa a lo largo y a lo ancho de la geografía provincial.
“El incremento de clientes está en constante crecimiento desde hace bastante tiempo. Un factor determinante es la entrega de nuevos barrios, en los últimos meses se entregaron en La Punta y Juana Koslay”, aseguró Héctor Fabián Roca, asesor de ventas de la oficina DirecTV ubicada en Av. España y Los Inmigrantes.
Dicho crecimiento se sostiene aun en la realidad actual, que muestra una inflación que corroe día a día al salario: La televisión paga aparece, en muchos casos, como opción de esparcimiento, sobre todo para las familias que debieron replantear su economía tras la suba de la tarifa de la mayoría de los servicios, los productos de la canasta familiar, el combustible, la cuota del colegio, etc. Ante ello, las empresas ofrecen planes a diferentes precios como una estrategia comercial que se adaptan a las necesidades de los clientes.
DirecTV contiene diferentes tipos de alternativas de acuerdo al bolsillo de los usuarios. Los clientes pueden contratar abonos mensuales de $505 hasta $1131, con la opción de suscribirse a paquetes premium HD o la incorporación grillas de canales extra, para películas infantiles y de adultos. Además, brinda la variante de un abono prepago que consiste en la recarga virtual o contratar productos con precios que van de los $399 hasta los $1401, dependiendo de los requerimientos del cliente.
Por su parte, la operadora de cable CTV otorga a sus usuarios un abono básico de $475 mensuales, y un servicio digital por $140, como una alternativa para aquellos que quieran suscribirse a un plan de servicio premium.
En el caso de Carolina Cable Color, otorga un plan básico de $506, con la chance de que el usuario pueda contratar paquetes premium HD, por un monto extra de $175, como otra alternativa a la grilla de canales del producto estándar. A su vez, TVC Puntana dispone de un servicio básico de $430, manteniendo la misma opción de poder suscribirse a otros servicios.
En función del incremento del consumo que se produce en la televisión paga, ya sea por cable o digital, se observa cómo decrece el consumo de la televisión por aire. Los puntanos eligen los servicios que ofrecen las distintas empresas como una alternativa más completa que se ajusta a sus intereses.
Jóvenes y Netflix
En esa franja del público puntano es donde adquiere mayor presencia. Es una alternativa hacia la cual migran porque los usuarios tienen la posibilidad de ver lo que quieren, cuándo, cómo y dónde cada uno lo desea. Netflix es una plataforma de Internet que provee series y películas bajo el sistema “on demand” (dónde y cuándo el usuario desea) a cambio de una tarifa plana, no se modifica con el consumo. En la actualidad va de $80 hasta $180.
“No veo televisión fundamentalmente por falta de tiempo. Es una opción muy atractiva para mi ritmo de vida, puedo ver películas y series en el momento que decido y puedo”, afirmó Nicolás Salomón, usuario de Netflix