¿Llega o no llega la tormenta de Santa Rosa?
Más mito que realidad. Si bien cada vez que se acerca el 30 de agosto algunos aguardan la tradicional "tormenta de Santa Rosa", popularmente bautizada así porque la feligresía conmemora el día de Santa Rosa de Lima, según el pronóstico extendido del Servicio Meteorológico Nacional, hasta el jueves no se esperan lluvias. Datos científicos de centros meteorológicos indican que en un siglo la tormenta se produjo sólo siete veces. Un mito sin mucho asidero científico.
Cuenta la leyenda, basada en sucesos del siglo XVII, que cada 30 de agosto se hace presente la lluvia, un fenómeno mejor conocido como “tormenta de Santa Rosa”.
El origen de la expresión proviene, en una suerte de realismo mágico, de la leyenda que tiene como protagonista a la religiosa Isabel Flores de Oliva, más conocida como Santa Rosa de Lima.
Corría el año 1615 en Lima, Perú, cuando Santa Rosa, considerada la patrona de las Américas, impidió, gracias a sus poderes místicos y al desencadenamiento de una tormenta, que piratas holandeses atacaran la ciudad.
Muchos años después, cada 30 de agosto la espera de este suceso meteorológico es casi religioso. Nunca falta quien recuerde que es la fecha de llegada de la tormenta de Santa Rosa.
El mito no tiene ningún sustento válido, más que la pura fe, que lo haga real. Según los meteorólogos, el evento no tiene la certeza que el imaginario popular le atribuye, e imputan su ocurrencia al choque de los primeros vientos cálidos con los frentes fríos producto del acercamiento de la primavera.
Los datos registrados dan cuenta de que, durante 107 años, sólo 7 veces llovió un 30 de agosto. Pero el mito también indica que la tormenta puede suceder cinco días antes o cinco después del 30 de agosto, por lo cual las posibilidades de que ocurra son mayores.
En la región de Cuyo, y en San Luis particularmente, se vienen registrando temperaturas que están más asociadas a la primavera que al propio invierno, superando los 25º, pero a partir de hoy comenzarán a descender.
Quizás este año les toque a los puntanos sentir la lluvia que envía Santa Rosa de Lima. A lo mejor, tener en Santa Rosa del Conlara esta presencia logre que el 30 de agosto, finalmente, se sienta olor a tierra mojada.