La opinión de los puntanos sobre La Saladita: Desde los beneficios que traería, pasando por la inseguridad y la competencia desleal

Hace unas semanas comenzó a circular la versión de la posible llegada de La Saladita a San Luis debido a que en unos 50 días, es casi un hecho, la feria abandonará territorio mendocino por diferencias con el municipio que lo intimó a regularizar el pago de impuestos. En base a ese rumor, diferentes sectores de la provincia de San Luis dieron a conocer su postura ante esta situación.

Uno de los que alzó la voz en un principio fue el presidente de la Cámara de Comercio de San Luis, Vito Carmosino, quien se opuso a esta eventual llegada de la feria, criticando la modalidad y manifestando que esto puede “afectar terriblemente a toda la pequeña y mediana empresa” y que por eso debe existir igualdad de condiciones para los comerciantes que desarrollan la tarea en el territorio provincial.

El dueño de La Saladita, Jorge Castillo, reveló que tiene “cinco ofrecimientos” para instalar La Saladita mendocina: “Uno en San Luis, en San Juan y tres en departamentos pegados a Santa Rosa”. Además, afirmó que “la decisión de ir a San Luis está tomada en un 99%”, dejando en claro su intención de instalar en territorio puntano la feria que actualmente tiene emplazada en Santa Rosa, Mendoza.

Incluso concejales capitalinos de diferentes bloques se expresaron al respecto, planteando diversas posturas. En ese sentido, el concejal del Frente para la Victoria, Roberto González Espíndola, manifestó que “si se ajustan a las normas no hay motivos para rechazar la llegada de La Saladita”. La edil de Cambiemos, Claudia Rocha, sostuvo: “Si cumple con los requisitos, será bienvenida cualquier feria a San Luis”; mientras que la concejala de Compromiso Federal, Sandra Barroso, afirmó: “No me gustaría que La Saladita llegue a San Luis”.

A todas estas posturas también se le suma la opinión de la sociedad, quien se ha manifestado de distintas maneras a través de las redes sociales. En facebook, la red social a través de la cual se han pronunciado, indican que los precios en San Luis son altos y esto beneficiaría al bolsillo de la gente, argumentando además que “la gente tiene derecho a elegir y los comerciantes no deben ser egoístas”.

Otro sector que se manifestó al respecto es el de las personas que sostienen que esto implicaría mayor inseguridad en la provincia. En ese sentido, algunos pusieron como ejemplo el manejo de La Salada de Buenos Aires, argumentando que está dividido en zonas y que la delincuencia está presente por diversos intereses y que esto “traería delincuencia y se terminaría la tranquilidad”.

Por otra parte, hubo un sector que planteó que la instalación de La Saladita en San Luis generará una competencia desleal y que la feria es “una invasión que esconde explotación laboral, adquisición mafiosa de mercadería y evasión impositiva y violencia latente”.

La polémica sigue, y los diferentes sectores ya se han expresado al respecto. Ahora hay que aguardar para saber si la idea de trasladar La Saladita a San Luis sigue su curso o finalmente opta por otro punto para la comercialización de los productos.