Una familia denunció a una clínica por la muerte de su bebé
Una pareja formalizó una presentación por “falta de cumplimiento de los deberes de profesional médico” contra integrantes del sanatario.
Acusaron a los médicos de la Clínica Italia de negarse a atender a la mujer que estaba sufriendo fuertes dolores en el vientre y que finalmente terminó perdiendo a su bebé de 5 meses de gestación.
La demanda recayó sobre “la Dra. Nicotra, el Dr. Páez y la partera que hacía guardia al momento del episodio, de la cual solo ha trascendido su nombre, Soledad”. Jaquelina Morán y Roger Garro sienten que fueron abandonados por el personal de la clínica.
El abogado de la pareja, Horacio Quevedo confirmó que radicaron la denuncia en sede judicial.
La muerte del bebé
El hecho ocurrió el 27 de octubre, en horas de la mañana. Jaquelina, embarazada de 5 meses, comenzó a sentir dolores en el vientre que preocuparon a la pareja. Decidieron llamar al médico, Di Menza, que estaba siguiendo el embarazo, pero les dijo que “hasta las 17 no podía atenderla”.
Como los dolores no cesaron, se dirigieron a la Clínica Italia, donde gozaban de una cobertura total por parte de su obra social. Garro narró lo que sucedió después: “Llegamos a la Clínica y nos atiende la mujer de la mesa de entrada y me pregunta de quién era paciente mi señora. Le informo y me contesta, ‘nosotros no podemos atender pacientes del doctor Di Menza’”.
Posteriormente, paga una suma extra de 350 pesos y esperan unos 30 minutos hasta que la atiende el médico José Luis Páez.
El profesional le plantea a la pareja la misma situación burocrática de la mesa de entrada y les dice: “yo a los pacientes de Di Menza no los atiendo, búsquenlo a él”, recordó Garro y tuvo en cuenta que “la doctora Nicotra tampoco quiso hacerse cargo de Jaquelina”.
Pasada una hora, los dolores de la mujer se agravan provocándole un desmayo en el pasillo del sanatorio. El hombre continuó su relató: “salí corriendo en busca de los doctores, y recién ahí logre que la atiendan”.
Cuando Morán ingresó a la sala de parto, los médicos se retiraron y “nos dejaron solos”, agregó Garro. Luego de casi media hora, “mi mujer me pidió que la acompañe al baño y antes de que pudiera bajarse la calza, expulsó al bebé”.
“La criatura estaba viva, movía la boquita, todo se movía”, dijo Roger y añadió que inmediatamente: “Salí disparando a buscar a los enfermeros y doctores”. Todavía en el baño de la Clínica Italia, el personal cortó el cordón umbilical.
El bebé fue trasladado a NEO, mientras que la mujer fue derivada al quirófano. Al cabo de unos 15 minutos, desde la sala lo llaman para “mostrarle el bebé que estaba muerto”.
Garro denunció: “desde la clínica no me dieron ninguna explicación sobre la muerte de mi hijo”.