Un paro que tomó forma de crisis en el fin de semana largo
El feriado no ocultó el conflicto de los choferes de las empresas de transporte interurbano que se mantienen con una medida de fuerza que va por el tercer día. Dos organismos que tienen competencia están bajo la órbita del ministerio de Gobierno.
Hoy se cumple el tercer día de paro de los trabajadores de María del Rosario, Sol bus y Line. La justicia ordenó que cesen con la medida de fuerza, mientras desde la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) esperan respuestas del Gobierno provincial a través del Programa de Relaciones Laborales del Gobierno y de la patronal.
Desde el gremio denunciaron “atropello y desprecio a los trabajadores de transporte de San Luis de los organismos e instituciones de la Provincia”. De ese forma aludió a Relaciones Laborales, la Justicia y a la Policía.
El conflicto se originó en un momento de transición en la cartera que dirige Eduardo Mones Ruiz. Tiene bajo su jurisdicción el área Relaciones Laborales y todavía no se libera de Transporte que de acuerdo a la nueva ley de ministerios pasó a secretaría General de la Gobernación.
Los empleados exigen una definición de alguna de las partes involucradas a sus reclamos laborales, que constan de 12 puntos, como los turnos cortados, las horas extras y feriados adeudados.
El secretario General de UTA San Luis, José Narváez informó que recibieron una notificación de la medida para levantar la medida de fuerza pero “no fue acatada porque todavía no llegamos a la instancia de diálogo en Relaciones Laborales”.
El dirigente sindical agregó que “aún no se declaró la ilegalidad del paro y tampoco se dispuso la conciliación obligatoria”.
Narváez también fue categórico al definir la orden judicial: “a qué estamos jugando, esto es un mamarracho del juzgado”.
“Esto viene del 30 de agosto y ahora la policía nos trata como si fuéramos delincuentes, hasta un camión de asalto trajeron” protestó el sindicalista
Narváez advirtió que van resistir ante “un eventual orden de detención”.