Avanza un acuerdo para reducir las comisiones que cobran las tarjetas

Después de largas discusiones de las que participaron en los últimos meses diferentes áreas del Gobierno, entidades financieras, administradoras de tarjetas y representantes de los comercios, finalmente se habría alcanzado un acuerdo para poner en marcha una rebaja de las comisiones que pagan los comercios por las compras que se pagan con tarjeta de crédito y débito.

Según trascendió de fuentes directamente involucradas en las negociaciones, se estableció un plazo de tres años durante los cuales se aplicará una reducción escalonada de los aranceles. Por las ventas realizadas con tarjeta de crédito, las comisiones que hoy están en torno al 3% bajarán al cabo de 36 meses al 1,8%. Para las de débito, que hoy están cerca del 1% el objetivo es llegar al 0,8%.

Según lo publicado por el diario Clarín, esta solución, que podría ser anunciada por el propio presidente Mauricio Macri mañana o el viernes en la Casa Rosada, fue elaborada con aportes del Banco Central, el Ministerio de la Producción, las cámaras de bancos y tarjetas de crédito y CAME, la entidad que preside Osvaldo Cornide.

La idea es que este consenso “de mercado” le cierre el camino al proyecto de ley, aprobado por el Senado que establecía llevar al 1% el arancel por ventas con tarjeta de crédito y al 0% las operaciones con tarjeta de débito. Los bancos aceptan el plan de rebaja escalonada y al mismo apuestan a una masificación del uso de los plásticos, para recuperar por volumen lo que pierdan por el recorte de los aranceles.

El Gobierno se involucró de lleno en esta discusión, y en el impulso por reducir las comisiones y avanzar sobre las tarjetas se tendió una trampa, al anunciar la operatoria de precios transparentes, tan llena de buenas intenciones como de malos resultados: el consumo se resintió sensiblemente por la eliminación de las llamadas “cuotas sin interés”, tanto que en febrero este tipo de operaciones se desplomó no menos del 30%, pero con retrocesos más profundos en el caso de electrodomésticos e indumentaria, dos rubros que basaban el 90% de su facturación en la venta en cuotas.

Fuentes del sector comercial aseguraron al medio que el acuerdo ya está listo. En el Gobierno anoche no confirmaban ni desmentían nada.

Lo cierto es que las máximas autoridades del Banco Central y el Ministerio de la Producción motorizaron las reuniones y presionaron a los bancos y a las tarjetas para llegar a un acuerdo. Los funcionarios también dijeron sentirse más cómodos con un acuerdo entre todas las partes antes que con una ley del Congreso.

De todas maneras persiste cierta incertidumbre. “Un tema a tener en cuenta es qué hará el Congreso. El Senado está pensando en aprobar el proyecto de ley que ya votó Diputados, para destrabar la situación, y ahora se avanza con un acuerdo de partes, no una ley. Y hoy las comisiones están fijadas por una ley. Habrá que ver si luego se ratifica o no el acuerdo en el Congreso”, dijo una fuente cercana a la confección del acuerdo.

En bancos y tarjetas no descartan que, a cambio de haber aceptado este plan escalonado de rebajas, el Gobierno revierta la prohibición a las “cuotas sin intereses”. Por eso no descartaban que parte de los anuncios del viernes reserven algún párrafo para relanzar los planes Ahora 12 y Ahora 18 , que hoy aplican tasas del 22,17% y 27,69% respectivamente.