“Sería doloroso que Estudiantes descienda; San Luis se merece un equipo en primera”
Así lo analizó Martín Cardetti en una entrevista que ofreció a El Chorrillero. El exjugador de River Plate está radicado en San Luis desde hace un tiempo, mientras espera que le llegue una propuesta para dirigir algún equipo. Eligió la tranquilidad de las sierras para pasar sus días, disfrutar de la siesta puntana y para estudiar inglés.
“Es una ciudad que visité mucho y cada vez que venía veía su progreso, su tranquilidad y su buena calidad de vida; creo que eso me ató a la ciudad, el querer estar más tranquilo”, destacó “El Chapulín” en el diálogo exclusivo que mantuvo con elchorrillero.com en las canchas de La Torre.
En 2012 Cardetti llegó a Juventud Unida Universitario para ser mánager y tener a cargo las divisiones inferiores. “Fue una linda etapa mientras me fui preparando para ser entrenador, en diferentes puntos de vista; quería ver lo que se siente desde el punto de vista dirigencial y las necesidades de un club. La pasé bien porque fue un tiempo en el que quería profesionalizarme y estudiar”, destacó.
Se fue por diferencias con un técnico, Darío Tempesta. Pero no se fue de San Luis. La tranquilidad ya lo había atado a la ciudad. Hoy está radicado en Potrero de los Funes junto a su novia y va pensando en nuevos proyectos. Quiere ser DT de un equipo grande, y por ahí pasan sus prioridades laborales en este momento.
“El descenso de Juventud fue doloroso, como lo sería ahora si le tocara a Estudiantes. Era muy bueno para el fútbol puntano tener dos equipos en el Nacional B. San Luis se merece un equipo en primera, por todo lo que trae el fútbol a una provincia, que no te das cuenta hasta que lo vivís”, respondió a la hora de analizar la situación de los dos clubes más importantes de San Luis.
Sobre Juventud dijo que: "Siempre fue un club ordenado, más allá de que bajar haya sido un golpe duro. Quedó golpeado, pero se irá acomodando. Hoy está haciendo lo que hablamos hace tiempo, el trabajar con juveniles y chicos del club. Creo que el principal error que cometió en el Nacional B fue traer mucha gente de afuera que no está acostumbrada a la ciudad y la forma de vida de San Luis”.
-¿Estás al tanto de la situación deportiva que vive el Club Estudiantes?
-Sé que está en la zona baja, que le está costando, pero lo pueden sacar. Y ojalá salga porque San Luis se merece un equipo más arriba; que lleguen a primera cualquiera de los dos.
-¿Qué te parece Omar Asad?
Es un DT trabajador, que le puede llegar a costar acostumbrarse a la vida acá, que no es la misma que en Buenos Aires, pero tiene capacidad, trabajó en equipos de primera división, sabe lo que conlleva el entrenamiento en este nivel y tenerlo es un salto de calidad.
-Siempre se cuestiona la falta de acompañamiento de la gente en las canchas, ¿creés que es una cuestión cultural?
-Los clubes ya saben cómo es la gente y le tienen que dar al hincha motivos para vaya a la cancha. Cuando estuve en Juventud en el Argentino “A” vi la cancha llena muchas veces. Cuando uno le da lo que la gente quiere, responde. Es una cuestión de idiosincrasia, del puntano, hay días que va y otros que no va.
¿Qué busca la gente?
-Cuando tenés buenos equipos y protagonistas van a la cancha, porque la gente está acostumbrada a tener cosas buenas, show, cuando le das las cosas buenas responden. Cuando Juventud peleó el ascenso siempre tuvo el acompañamiento de a gente, yo lo viví.
¿Significa tener equipos con jugadores trascendentes?
-Creo que tiene que tener dos o tres, y los demás acompañarlos con los de jugadores de acá, porque hay buenos jugadores. Hay chicos en Juventud que son del club, que los vi desde chiquitos y que hoy están en primera respondiendo de la mejor manera. Te das cuenta que material hay, que tenés que darles comodidad y Juventud siempre lo tuvo; tiene sus cosas para darle a los juveniles, para que trabajen bien y lleguen de la mejor manera posible.
-¿Cómo es el puntano?
Vive su vida tranquila, eso es lo bueno. La vida que se lleva acá no se vive en otro lado, pueden pasar cosas, pero si te ponés a comparar con otras ciudades, acá es tranquilo. La gente vive tranquila, hace lo que le gusta, lo que quiere y no tiene responsabilidades más que lo laboral.