Un padre reclama por la atención en la maternidad provincial
Virginia Pannocchia tuvo hace 25 días a su tercer hijo. Fue sometida a tres intervenciones quirúrgicas y se encuentra en terapia intensiva en la Maternidad “Dra Teresita Baigorria”. Julio Pannocchia hizo público el problema de su hija porque “no tengo respuestas”.
El niño nació el 30 de marzo por cesárea y según el padre de la joven, Julio Pannocchia, “todo salió bien, pero a los diez días comenzó a tener fiebre hasta llegar a los cuarenta grados, entonces decidimos internarla”.
Este domingo decidió hablar y dio a conocer a este medio el problema. Amigos y allegados a la familia se expresaron durante el fin de semana por las redes sociales.
En la “primera operación, los médicos le realizaron un legrado” y le suministraron antibióticos y analgésicos.
“Sacaron ecografías, pero los doctores no vieron nada”, explicó el hombre y agregó que, “el diecisiete de abril le dieron el alta, pero no me comunicaron el parte médico”.
A pesar de los esfuerzos de los médicos, la mujer continuaba decaída por lo que su padre la llevó nuevamente.
La mujer debió ser operada por segunda vez. Su progenitor describió que, “estuvo cuatro horas en el quirófano, allí le abrieron la panza de punta a punta, y le hicieron una limpieza”, y se quejó porque “le curaban sus heridas en carne viva con alcohol, por lo que ella gritaba y lloraba”.
Julio Pannocchia relató que, después de la intervención “la seguía viendo mal, tenía el cuerpo amarillo, pensé que se me moría ese mismo día”.
Desde la maternidad decidieron convocar a otros especialistas externos, para determinar qué sucedía con Virginia.
“Llamaron a cuatro médicos del Policlínico San Luis y a uno del Hospital de Villa Mercedes”, indicó. Uno de los doctores le dijo: “Este caso es similar al de la chica de Beazley (Ivonne Gñaves), parece que es un virus”.
Julio Pannocchia aclaró que: “Insistí para que le realicen una tomografía computada, se reunieron los cinco médicos que habían llamado, me dieron la razón y descubrieron que tenía una infección en el útero que se estaba expandiendo hacia el intestino”.
En la tercera cirugía, realizada ayer, que duró alrededor de tres horas y media le extirparon el útero.
El hombre descartó cualquier problema pre-parto: “Con mi anterior nieto no hubo ningún inconveniente, los controles siempre arrojaron buenos resultados”.
“El doctor que le hizo la cesárea a mi hija es un residente, a mí me dijeron que los residentes sólo deben observar, pero este hombre hizo todo solo”, contó a partir de las respuestas que obtuvo.
Pannocchia pidió una audiencia a la ministra de Salud, María José Zanglá. En representación de la funcionaria lo recibió la viceministra, Karime Raed. Ahora, evaluará los próximos pasos a seguir.