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Unieron sus plegarias a través de un rosario que “voló” 200 kilómetros

Los habitantes de un paraje de San Luis, elaboraron un rosario con materiales livianos y lo rodearon con 100 globos inflados con helio, para que viajara hasta los lugares más recónditos posibles. Lo encontraron en la provincia de Córdoba.

Gentileza Capilla María Auxiliadora.
Así se elevó el rosario que viajó hasta la provincia de Córdoba.
Actualizada: 06/06/2017 16:34
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Colonia Delia, zona rural del departamento Coronel Pringles, realizó el 24 de mayo su celebración religiosa en honor a María Auxiliadora.

La adoración se debe a que los habitantes son en su mayoría trabajadores rurales y terratenientes, lo que genera su devoción a la “Patrona del agro”.

Sus plegarias están enmarcadas en diversos ejes, pero se destacan los que ruegan por las cosecha y la protección de los recursos.

Todo fiel que pide a la virgen o a alguna representación divina, retribuye con una ofrenda. Algunos lo hacen rezando, otros concretan sacrificios físicos, espirituales, pero en el paraje decidieron prometer algo particular: “Soltar un rosario con globos, que lleve el mensaje divino hasta los rincones más profundos posibles”.

“Queríamos regalarle a la Virgen algo particular, más allá de los protocolos tradicionales, necesitábamos hacer un homenaje especial”, comentó la presidenta de la comisión que tiene a cargo la capilla, Cristina Palmero, en diálogo con este medio.

Las cuentas religiosas fueron construidas con materiales de telgopor y 100 globos inflados con helio. La idea era que los niños lo dejaran volar, pero por alguna razón, no sucedió.

Los pequeños abrieron sus manos delicadamente en señal de respeto al momento, para que tomara su rumbo; pero no pudo elevarse y cayó a los pocos metros. A pesar de que impactó con las ramas de los árboles, lo rescataron intacto.

El rosario está elaborado con materiales livianos y luce la estampa de María Auxiliadora.

La fiesta siguió su transcurso, tal como lo hacen desde hace 30 años. La novena fue oficiada por el cura párroco de La Toma, Ignacio Lucero, quien también concretó los actos litúrgicos posteriores.

Luego rezaron la procesión y la congregación religiosa finalizó con una cena show, donde las familias disfrutaron de espectáculos musicales.

A pesar de que se vivió una emotiva jornada, quedó resonando en los corazones de los organizadores “que no se proyectó el regalo a la Virgen”.

Por ello, el 28 de mayo se reunieron integrantes de la comisión y decidieron impulsar un segundo rosario, esta vez un poco más pequeño, de unos 50 centímetros de largo.

Lo pintaron de amarillo y blanco, en consonancia con la bandera papal y anexaron en uno de sus rincones el teléfono de la capilla, junto a una estampita de María Auxiliadora.

Según explicó Palmero, el cielo estaba despejado,  no  había nubes que impidieran divisar el vuelo. La suave brisa que integraba el día lo elevó rumbo al sur y contemplaron su camino hasta el punto en que se desdibujó de sus ojos. Sus miradas quedaron ancladas como gesto de plegaria.

“Ojalá que lo encuentre alguien”, rogaron en el secreto de sus conciencias.

El 1° de junio, un llamado sorprendió a los integrantes de la comisión, ya que una familia de una zona rural cercana a la localidad de Alejandro Roca, provincia de Córdoba, encontró las cuentas en medio de su campo.

El viento lo trasladó durante un recorrido aproximado de 200 kilómetros. Los fieles creen que el hecho simboliza un mensaje de agradecimiento. “Nosotros prometimos que si alguien lo encontraba, le haríamos llegar el primer rosario que hicimos”, detalló Palmero con un tono que evidenció su emoción.

Las cuentas pudieron haber tomado cualquier rumbo. El vuelo estaba librado a una suerte de azar, pero los creyentes sienten que “Dios custodió el recorrido”. “No es casualidad que siendo María Auxiliadora patrona del agro, haya caído en el seno de una familia oriunda del campo”, expresó manifestando su fe.

Tanto la familia cordobesa como los sanluiseños, se mostraron felices y agradecidos en un contexto de hermandad cristiana. “A lo mejor Dios nos puso a estas personas en el camino, para unirnos a través de la fe”, comentó.

Ahora los habitantes de Colonia Delia viajarán hasta el campo cordobés, llevarán a cabo un recorrido similar al de las esferas flotantes y mientras el vehículo se movilice, verán a través de la ventana el cielo que cuidó el viaje del rosario y estarán muy seguros de que su fe no tan solo mueve montañas, sino vuelos divinos.

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