Mendoza: Fue atacada por su ex pareja y recibió una fractura de cráneo
La mujer temía cualquier manifestación de violencia por parte del agresor, quien ya tenía una orden de restricción en su contra.
Una mujer se encuentra internada en terapia intensiva con fractura de cráneo y hemorragia en un oído, luego de ser atacada por su ex pareja en plena vía pública, precisamente en una avenida céntrica de la ciudad mendocina San Rafael.
La víctima fue identificada como Vanesa Aspitia, quien permanece internada con pronóstico reservado en la sala de Terapia de Unidad Intensiva del Hospital Schestakow. Allí reside con politraumatismo y Traumatismo encéfalo craneal sin asistencia respiratoria mecánica.
El agresor se trata de Jesús Navarro, la ex pareja de la víctima que había sido condenado anteriormente por una agresión similar y ya tenía orden de restricción perimetral contra la mujer.
Navarro también ingresó al mismo centro médico donde se encuentra su ex mujer, debido a que fue lesionado por algunos transeúntes que pasaban por el lugar y que salieron a socorrer a la mujer. El acusado presentó un cuadro de politraumatismos y yace con custodia policial.
Fuentes policiales informaron que la víctima temía a lo que le pudiera suceder, por lo que llevaba encima gas pimienta, aunque no lo pudo utilizar para defenderse.
El violento episodio se produjo en la avenida Mitre al 1900 (San Rafael) donde el hombre agredió a su ex pareja, luego de haber infringido una orden judicial ya que tenía una prohibición de acercamiento con la víctima.
El 13 de octubre Navarro había sido condenado por otro hecho de violencia de género contra la misma mujer, pero en esa oportunidad la Justicia lo benefició con una pena de suspenso, sin ir a prisión. El detenido aprovechó la oportunidad para volver a atacar a su ex mujer.
En el lugar de la agresión trabajaron efectivos policiales que tuvieron que interrumpir el tránsito y luego, acompañar el recorrido de la ambulancia que de inmediato trasladó a la víctima a un hospital público. La investigación quedó a cargo del fiscal Mauricio Romano.