Se cumplen 5 meses de la desaparición de Lucas Bolotti
Cuestionamientos al Poder Judicial y a la Policía, pedidos de recompensa y cartas desgarradoras por parte de la madre son el resumen de un caso que sigue presente en la vida de los sanluiseños.
El 19 de julio, en el paraje El Recuerdo en Papagayos desapareció Lucas Bolotti, un joven de 24 años que presenta un retraso madurativo. Desde ese día y tras la denuncia de la familia, se realizaron diferentes operativos para dar con él, ninguno con éxito.
La búsqueda se centró en rastrillajes, filmaciones de videos, testimonios, expertos de otras provincias y hasta parapsicólogos, todo para dar con Lucas.
Hasta el Gobierno provincial dio a conocer el 14 de septiembre que le pagará $500 mil a cualquier persona que brinde información precisa sobre su paradero.
Los familiares, siempre se mantuvieron activos con el pedido de búsqueda. Ya en los primeros momentos iniciaron una fuerte campaña en las redes sociales para tratar de dar con alguna pista.
La hermana de Lucas, Melina Bolotti luego de 30 días mostró su desesperación en un escrito en su perfil de facebook: “Necesito que aparezca mi hermano. Necesitamos que se mueva cielo y tierra. Necesito su sonrisa para vivir, que me pelee, que me haga unos mates asquerosos y sobrepasados de azúcar”.
Su madre, Estela Vicondoa, asumió un rol mucho más activo en las últimas semanas denunciando las “irregularidades” por parte de la Justicia de San Luis y apuntando al desempeño de quienes llevan las riendas de la causa encabezada por la jueza Penal de Concarán, Patricia Besso.
“No son ciertos los pedidos formales de grabaciones de las cámaras de los peajes, ni de las terminales de micros y estaciones de servicios”, resaltó.
Además señaló que debieron “soportar ser investigados, acusados e incluso incriminados”.
El pasado 11 de diciembre nuevamente se pronunció Vicondoa, para expresar su agradecimiento a las personas más cercanas y sus más profundas sensaciones y angustias. Allí remarcó que la situación que vive es “terriblemente difícil”.
En una de las partes más significativas, la mujer pidió por su hijo: “Les pido que por favor nos lo devuelvan, él no va a saber decir quien lo tenía ni donde estaba. Déjenlo en una estación de servicio o terminal de micros, por favor”.
Al final, abrió una puerta a la posibilidad de que su hijo pudiera estar muerto y se dirigió a los “secuestradores” aconsejando que “dejen una nota” para que “encontremos su cuerpito”. “Quiero poder abrazarlo por última vez”, suplicó.
Este martes la mujer se pronunció respecto al aniversario de la desaparición y aseveró que se cumplieron 5 meses de “sacar fuerzas de donde no tengo para seguir buscándote y deseando con todas mis fuerzas encontrarte”.