La marcha de Moyano: los que apoyan y los que no
El acercamiento del kirchnerismo y la fractura en la CGT.
La protesta está respaldada principalmente por las filiales de Camioneros, ambas CTA, ATE, la Corriente Federal de Trabajadores, partidos de izquierda y organizaciones sociales y piqueteras como Barrios de Pie, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC).
También apoyan el kirchnerismo, gremios docentes como Ctera y Suteba, y La Bancaria, que viene de realizar un paro el lunes y martes para reclamar un mayor aumento salarial.
Las consignas principales de estos sectores que se movilizan es reclamar por los despidos en el sector público y privado, contra el "ajuste", por el "recorte" a los jubilados tras la reforma previsional, por paritarias libres que superen a la inflación y para repudiar los nuevos aumentos en los servicios públicos y transporte, según lo consigno el sitio Telefe Noticias.
Por el contrario, entre los que se bajaron hay pesos pesados como los empleados de comercio comandados por Armando Cavalieri, personal de la Sanidad de Carlos West Ocampo y los trabajadores de la alimentación liderados por Rodolfo Daer. También confirmaron sus ausencias los "independientes" del estatal Andrés Rodríguez, el constructor Gerardo Martínez y José Luis Lingeri (Obras sanitarias).
Los metalúrgicos de Antonio Caló, los encargados de edificio de Víctor Santa María y los gastronómicos de Luis Barrionuevo anunciaron que tampoco acompañan la movilización. Lo mismo que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Unión Ferroviaria, bajas sensible a la hora de conseguir efectividad en una medida de fuerza.
Pero más allá de la cifra de manifestantes que participen, la marcha deja una herida en el movimiento obrero: la ruptura en el triunviro de la CGT. Juan Carlos Schmid apoya la protesta, mientras que los otros líderes de la central obrera, Carlos Acuña y Héctor Daer, fueron muy críticos. Los tres reconocieron que la conducción del triunviro fracasó y es un ciclo agotado.
Esta fractura se produce además en un momento en el que se abrieron las discusiones paritarias de este año y con el preámbulo de intento de avance que prevé el Gobierno, total o parcial, sobre los puntos planteados por la reforma laboral que está en el Congreso.