Adolfo R. Saá criticó al Gobierno por mostrar los presos K “en pijama y con cascos ridículos”
El legislador nacional cuestionó al Gobierno nacional durante el tratamiento en el Senado del nuevo régimen de subrogancias para la Justicia Federal, y apuntó a los medios de comunicación por reproducir las imágenes.
“Defender los derechos y garantías que nos da la Constitución Nacional parece redundante a esta altura, sin embargo son puestos en dudas todos los días y por eso debemos tener una firme convicción al respecto”, sostuvo Adolfo Rodríguez Saá, e insistió en que “el principio de inocencia está ligado a la dignidad de las personas”.
El legislador por San Luis se quejó porque “hoy los medios de comunicación deciden antes que los jueces, opinan si una persona es o no culpable; a esto se prestan aquellos que cuando detienen a una persona los filman en pijama o con un casco ridículo”.
De ese modo aludió a los operativos de detención del exvicepresidente, Amado Boudou y el exsecretario de Obras Públicas, José López que tuvieron una fuerte cobertura mediática.
“Estas cosas que se están haciendo hoy no se hacen. Estas cosas van a ser la mayor mancha de la historia reciente. No tenerle respeto a las personas es una falta gravísima a esta altura; el juez natural es el que lo tiene que juzgar, no un juez a medida y que ayude a tapar el delito o que condene sin derecho a defensa”, añadió mientras la expresidenta, Cristina Kirchner que estaba a su lado convalidaba la posición de Rodríguez Saá.
Además pidió “que no las ridiculicen ante el pueblo”, y se preguntó: “si esa persona es inocente como lo establece la Constitución, ¿quién va a reparar semejante daño ante los familiares, amigos, vecinos, ciudadanos?”. Dijo también que “estas cosas no deben suceder, es una falta gravísima”.
“…en el siglo diecinueve los azotes, en el siglo veintiuno presentarte ante la televisión con un gorro de Gendarmería, eso es un tormento; (es) una pena adicional a la situación que está viviendo un ciudadano que es investigado y que si es culpable deberá sufrir una condena… y aun siendo culpable nadie tiene derecho a faltarle el respeto a la dignidad humana”, cerró el expresidente que apoyó la ley.