Encuentran muerta a empleada doméstica que robó y vendió joyas de su jefa
La joven de 27 años robó un millón de pesos en alhajas de su empleadora y la encontraron degollada en su casa.
Una empleada doméstica le confesó a su jefa haberle robado las alhajas de la casa y haberlas vendido en una joyería a cambio de un millón de pesos. Dos días después la jefa, Norma Lilia Ávila (59), realizó la denuncia correspondiente en la Comisaría.
La víctima, identificada como Estela Maris Ocaranza, de 27 años, oriunda de Santiago del Estero fue encontrada el lunes sin vida, degollada en su casa del Barrio Siglo XX.
Fue el esposo de Ocaranza, Silvio Oscar Gómez, quien la encontró y alertó a la policía del hallazgo de su pareja tendida en el suelo, poco después de las seis de la mañana, en el fondo de su vivienda, consignó FileNews.
En principio presentaba una herida en el cuello y se interpretó que sería un suicidio, pero para algunos expertos, el hecho no se condice con las formas usuales en que una mujer cometería ese hecho. El primer sospechoso al momento es el esposo, quien la acompañó durante las últimas semanas.
De la escena del crimen secuestraron un cuchillo y ropa. En estas horas el cuerpo está siendo sometido a una autopsia.
La empleada doméstica habría sustraído las joyas de su jefa porque su madre tenía un problema de salud. Las vendió y luego terminó confesando ante su empleadora. Cuando intentó recuperar lo vendido ya era tarde… la joyería ya las habían enviado a fundición.
Cuando la fiscal Carla León solicitó el allanamiento, se produjo sin éxito y su abogado pidió la eximición de prisión para Ocaranza.