Rusia superó 3-1 a Egipto y quedó casi clasificada a octavos de final del Mundial
Los locales volvieron a ganar, sumando dos triunfos y ocho goles a favor. Mohamed Salah marcó el descuento, de penal.
En la primera mitad se prestaron la pelota. Se dividieron la tenencia, y el desarrollo entonces fue parejo. Pero el ahogo que ejerció el local en los primeros minutos dejó la sensación de que fue más y mereció mejor suerte, pero todos sus centros fueron imprecisos.
La presencia de Mohamed Salah en los Faraones -ausente en el encuentro ante Uruguay por lesión- mantuvo en vilo al equipo ruso, porque sabía que no podía descuidarse. Y aunque participó poco, todas las pelotas pasaron por él y tuvo una que se fue muy cerca.
Pero todo cambió en el complemento. Porque el dueño de casa se apoderó por completo del juego y pasó por arriba a los egipcios. Ya en el primer minuto, los Osos presionaron y obligaron a Ahmed Fathy a meter un gol en contra cuando trataba de despejar un centro.
La marea de Rusia no aflojó, y en tres minutos liquidó el partido. A los trece, Denis Cheryshev amplió el resultado con una buena jugada personal (y metió el tercero en la Copa, alcanzando a Cristiano Ronaldo como goleador). Y a los 16 Artem Dzyuba hizo estallar San Petersburgo con otro más, que sentenciaba el resultado.
Y por más que Salah descontó a los 28 de penal (sí, otro que obra el VAR), el anfitrión nunca vio peligrar el triunfo, el segundo en su Copa y ante su gente, con ocho goles a favor y uno solo recibido.
Aunque suma seis puntos y marcha invicto, Rusia todavía no abrochó su pase a octavos de final, pero tiene casi listo su boleto a la siguiente ronda, que deberá confirmarlo el lunes 25 ante Uruguay en Samara.
Al contrario, Egipto sigue con chances de meterse entre los 16 mejores del torneo, pero depende de un milagro, ya que Arabia debe golear a la Celeste este miércoles, y en la última fecha los Faraones tendrían superar por muchos goles a los Hijos del Desierto y los rusos derrotar a los charrúas.