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“En las autopistas de San Luis debería haber barreras de contención, no forestación”

El perito José Quevedo puntualizó los principales ejes que podrían evitar accidentes y salvar vidas. Para el especialista la necesidad más urgente es la “inversión en estructura”.

De acuerdo al especialista, la prevención vial debe abordarse multidisciplinariamente.

por gatica

elchorrillero.com

Actualizada: 17/07/2018 23:50

Los siniestros que han ocurrido en lo que va del año y en particular la tragedia en la que cuatro personas murieron el fin de semana luego de que un auto se cruzara de carril, dispararon una serie de preguntas.

El perito en tránsito José Quevedo, quien lleva más de 20 años trabajando e investigando en la materia, avalado por la Superintendencia de Seguros de la Nación, dio su punto de vista.

El especialista remarcó que sus fundamentaciones atraviesan “sólo algunos ejes” de una multiplicidad de factores que influyen en la seguridad vial y aseveró que San Luis tiene problemas “de estructura” que debe solucionar de manera “urgente”.

Para Quevedo es importante invertir en estructura para prevenir cualquier error humano.

Muros de contención, forestación, áreas de descanso en peajes, entre otros aspectos, fueron los puntos en los que trazó sus conclusiones.

-¿Las autopistas de San Luis deberían tener muros de contención?

-Antes de contestar, pregunto: ¿De qué nos sirve tener alrededor del 35% de las autopistas si nos podemos matar, incluso cumpliendo las normativas? Hay algo de lo que se puede estar seguro y es que el hombre se puede equivocar.

Para ser más didáctico, uno diría que 2 más 2 es 4 pero alguien podría afirmar que es 3,5, esto quiere decir que siempre habrá un factor humano (errores) que puede provocar accidentes y en ese sentido se debe trabajar desde la estructura. Esto lo digo sin recurrir a bibliografía sueca o alemana, se trata de sentido común, nos vamos a equivocar y si eso pasa ¿cómo freno?

Se invierte en monitoreo y edificios para cobrar multas que no evitan muertes. Hay que invertir en estructura, en San Luis las autopistas no tienen muros de contención y deberían poseerlos.

-¿Qué tipo de muros debería tener?

-Hay que invertir de acuerdo a tres sistemas. La barreas new jersey que consisten en un bloque de cemento como los que se encuentran en el circuito semipermanente de Potrero de Los Funes.

A eso se le debe asignar un terraplén de unos siete metros con tierra, es decir un muro de cada lado más el terraplén. Esto protege a los vehículos del que viene de frente ya que provoca que el auto se levante y a lo sumo se de vuelta, evitando que cruce de carril.

Después están los tipos de bloque que se llenan con agua para que absorban la energía de un impacto frontal, generalmente se colocan en esquinas y desviaciones. Por último se encuentra el guardarraíl que todos conocemos.

Lógicamente si viene un camión con 30 mil kilos de carga a la altura de Fraga, zona donde es más probable que se produzca un choque porque es donde más está dañado el cemento, a una determinada velocidad el peso aumenta y no se frena con nada. Asimismo los muros de contención previenen que los vehículos se crucen de carril y toda la autopista de San Luis debería tenerlo.

-La forestación que se establece en los canteros centrales ¿afecta el campo visual?

-Si. El tema de los árboles por ejemplo está bárbaro como un hecho decorativo, pero no ves al que viene de frente y el problema aumenta si estas plantas crecen.

En Mendoza se están sacando este tipo de forestación. De hecho han implementado un sistema que consiste en dejar una distancia considerable entre los carriles y dejar ese sector con pedregullo, lo que causa que cualquier vehículo que se desvíe quede enterrado ahí, entonces si bien no tienen muros esto evita accidentes.

Para Quevedo el principal problema de la forestación es la dificultad que provoca en el campo visual del conductor.

¿Hay normativas que establezcan la presencia de ambulancias en peajes o disposiciones referidas a la estructura de las rutas?

-A nivel nacional existen normativas que establecen características referidas a las rutas, pero las autopistas dependen de la provincia. A nivel local no he tenido acceso a ese material, pero en referencia a los años de trabajo en compañías de seguro donde he investigado parámetros regidos por la ONU o la OMS, se aprecia que hay algunas cuestiones que no se cumplen, como es el caso de los muros de contención.

En lo que hace a las ambulancias no hay nada que lo regule, lo que sí es cierto es que los peajes no cuentan con ese servicio.

He visto que el Gobierno provincial ha hecho cosas positivas como la creación del Departamento de Seguridad Vial, pero son hechos políticos, cosas light.

Para dar una idea de lo que muchas veces se debe analizar, quisiera saber si las personas que fallecieron en el accidente del fin de semana estaban medicadas, dado que hay fármacos que no son óptimos para conducir y no es algo que se controle.

No sólo debe haber cero tolerancia al alcohol, sino cero tolerancia a estos medicamentos, también se debería controlar las cubiertas de los rodados.

¿Hay otros aspectos para corregir en las autopistas de San Luis?

-Si, las áreas de descanso de los peajes. Estas se encuentran en la salida de las vías de escape y no es bueno ya que dicho sector se hace para que aquel vehículo que se queda sin frenos pueda salir. En el Peaje Los Puquios un camión que llegue sin frenos se lleva todo puesto.

Lo que debe quedar claro es que hay un problema de estructura que precisa inversión, y por otra parte se debe trabajar en el resto de las aristas de los problemas viales.

Es claro que hay situaciones que pueden provocar accidentes como el uso del celular, el hecho de prender un cigarrillo o tomar mate mientras se maneja, pero eso no priva la necesidad de construir los muros de contención porque el error no solo puede ser consciente sino también puede derivar de un ataque al corazón o un ACV y allí no se aplica la prevención desde lo pedagógico.

El problema se debe abordar multidisciplinariamente desde la antropología, la geoinformática, la sociología, entre otras ramas. En San Luis no se trabaja de este modo.

Para ejemplificar, los accidentes que se dan desde El Trapiche se ocasionan por las ondulaciones que tiene el pavimento; si uno viene a 100 km/h y agarra una ondulación sale despedido, luego pueden interferir otros factores como el clima.

Un vehículo que circula a 110 km/h frena a los 90 metros, pero eso se incrementa si tiene las cubiertas en mal estado y si las condiciones climáticas interfieren modifican las características del pavimento.

En San Luis no se trabaja interdisciplinariamente para prevenir estos factores. Si se sabe que el 90% de los accidentes son causados por hechos humanos hay que invertir en estructura, más allá de los centros de monitoreo. Invertir en estos centros se relaciona a lo decía Michael Foucault, vigilar y castigar, es un sistema panóptico.

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