Roger Waters volvió a deslumbrar a una multitud en La Plata
El exintegrante de Pink Floyd tuvo su primer show en el país de su gira "Us+Them". Un despliegue musical y visual impactante. “Es una noche especial para mí porque están las madres de los soldados muertos en Malvinas”, dijo.
Pasadas las 21, en la gran pantalla montada sobre el escenario, apareció una chica de espalda al público. Estaba contemplando el mar desde la costa. El cielo fue cambiando de color hasta volverse rojizo. En ese momento, Roger Waters irrumpió sobre el escenario. Fue el comienzo de una noche emotiva y épica. Después de seis años, el exintegrante de Pink Floyd regresó al país para presentar su gira “Us+Them”. Un repaso por su obra más importante de la legendaria banda, con discos como Dark Side Of The Moon, Animals, Wish You Were Here y The Wall, más su último trabajo solista Is This The Life We Really Want?
Un estadio Único de La Plata colmado de fans cargados de energía y con ganas de escuchar a la leyenda. El primer tema fue “Breath”, del clásico álbum “El lado oscuro de la luna”. Waters, vestido de negro -su uniforme oficial- desafió con su bajo al público y recorrió el escenario -lo haría en distintos momentos de la noche- saludando a sus fieles, al ritmo de “One Of These Days”. Entonces, la pantalla se llenó de relojes psicodélicos para darle paso a “Time”.
“The Great Gig in the Sky” fue el primer momento emotivo del show, con las tremendas voces de las Lucius, otra perla del exitoso disco Dark Side Of The Moon. Con “Welcome to the Machine”, Waters se transformó en el líder perfecto, cuando interactuó con su público.
Llegó el momento de los temas más nuevos: “Deja Vu” (una crítica del artista a los drones), “The Last Refugee” (con impactantes fotos de refugiados) y “Picture That”. Las luces de los celulares invadieron el estadio en la siempre presente “Wish You Were Here”, con dos manos que intentan saludarse en la pantalla gigante.
El Único se cargó de ritmo con “Another Brick in The Wall”, con un coro de chicos sobre el escenario. “Son hermosos y son de ustedes. Son jóvenes de Buenos Aires”, fueron las primeras palabras del artista ya casi promediando el show. Fue el anunció de un entretiempo, en un partido que ya lo tenía a Waters como máximo goleador.
La pantalla sirvió para compartir a la audiencia las creencias del rockero inglés. "A resistir" fue el lema ¿Frente a quién? Y llegó el listado: Mark Zuckerberg (fundador y CEO de Facebook), el antisemitismo, a las fuerzas policiales, a la contaminación del planeta y a los crímenes de guerra, entre otros. Ya en la segunda parte, la impactante escena se iluminó con la famosa usina de la tapa de Animals.
Un despliegue impactante, con las chimeneas que sobresalen los bordes de la pantalla. No podía faltar el chancho volador, emblema del álbum. Entonces sonaron “Dogs” y “Pigs”. Waters con una máscara de un cerdo muestra un cartel con la frase “Pigs rules the world (Los cerdos dominan al mundo)”, que cambió por el de “Fuck the pigs”. Una bajada de línea contra Donald Trump, con su rostro caracterizado en las pantallas de distintas formas. Se escucharon algunas de las frases más provocadoras del presidente de los Estados Unidos. Y hay lugar para otra frase contundente: “Trump es un cerdo”.
Otro éxito que no podía faltar fue "Money" de Dark Side Of The Moon, un análisis del mundo capitalista y el consumo, que tuvo como referentes en la pantalla a líderes mundiales. El aire se transformó en emoción al sonar “Us and them”, tema que le da nombre a la gira. El prisma inmortal de la tapa de “El lado oscuro de la luna” dijo presente en 3D durante “Eclipse”.
“Es una noche especial para mí porque están las madres de los soldados muertos en Malvinas”, contó a la audiencia Waters, ya entrando en la última parte del show. El músico fue clave para el reconocimiento de varios de los soldados argentinos caídos en la guerra. El cierre fue con la querida e inoxidable “Confortably numb”, de The Wall.
La primera noche de Waters con Us+Them llegó a su fin. Este sábado, el artista volverá a subir al escenario para un nuevo encuentro con sus fans. A los 75 años, el exintegrante de Pink Floyd brilló otra vez en la Argentina. Continuará…