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La familia de Coquito transmitió tranquilidad: “Está con nosotros, pero perdió la vista”

Su hermana, Norma habló sobre el estado de salud de uno los vecinos más conocidos de la ciudad. Contó que buscarán que sea atendido por médicos especialistas en Villa Mercedes para analizar si puede acceder a una intervención quirúrgica.

Tras perder la vista, su familia decidió que no fuera más al centro.
Actualizada: 20/06/2019 00:15
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José “Coquito” Alcaraz es uno de los personajes icónicos de San Luis. Siempre fue habitual verlo por las distintas calles del microcentro, hasta hace unos meses cuando su familia decidió resguardarlo.

A partir de la ausencia del hombre de 55 años en los lugares que frecuentaba, circularan mensajes en las redes sociales planteando interrogantes. Hasta se llegó a decir que había fallecido. Su hermana Norma, fue la encargada de desmentirlos: “Está con vida y bien”.

En declaraciones a El Chorrillero, contó que se enteró de la falsa información cuando una de sus hijas fue a comprar y le preguntaron por la salud de Coquito.

José nació con retraso madurativo y desde muy pequeño se hizo conocido por “ordenar el tránsito” en la calle Pringles de la ciudad. A su vez, era frecuente que “labrara multas” a los taxistas por estacionarse mal.

Coquito vive con su hermana y sobrinos.

La mujer explicó que hace unos meses, Coquito perdió la vista y por eso decidieron que “no fuera más al centro”, para “cuidarlo y protegerlo”.

Este martes, luego de que se viralizara de que había fallecido, su allegados lo llevaron hasta la puerta del supermercado de calle Pringles. “Para que la gente lo viera. Él ama el centro y anda de los 10 años en la calle”, indicó.

Norma señaló que acudieron a especialistas y estos adjudicaron la falta de visión a que “se le cortó una venita”, y por esto no fue posible que utilizara anteojos o lo operaran.

Sin embargo, la semana que viene viajarán a Villa Mercedes para que sea recibido por especialistas y puedan darle otro diagnóstico.

Norma aseguró que su familia no ha difundido mensajes y tampoco han solicitado colaboración o donaciones para su hermano. “Ayuda no necesitamos porque no queremos que hablen mal”, insistió.

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