Día del Nutricionista: escuchar y seguir a los que saben
Por la Dra. Marcela Stambullian (*)
Por la Dra. Marcela Stambullian (*)
Hace unas semanas leí un texto que expresaba la siguiente pregunta: "Si tuvieras un dolor de cabeza intenso, ¿consultarías a un influencer o a un médico?". Lo mismo aplica para alguien que necesita aprender o informarse sobre alimentación y nutrición, ¿a quién consultaría?.
En los últimos años, el desarrollo de las redes sociales, las aplicaciones y demás formatos digitales, ha facilitado que cualquier persona con interés, pasión o curiosidad por la alimentación, se sienta habilitado para comunicar al respecto, sin importar el compromiso social que ello conlleva.
En Argentina existen más de 32 carreras, de universidades públicas y privadas, para la formación de Licenciados en Nutrición. Los nutricionistas universitarios somos profesionales que estudiamos en profundidad los alimentos, el cuerpo humano y las personas -como individuos o colectivo social-, para poder adaptar la alimentación a las diferentes condiciones. Como profesionales de la salud, tenemos la responsabilidad de velar por comunicar, a nuestra sociedad, pautas alimentarias, que no sólo respondan a la evidencia científica actual sino a las particularidades de las personas individuales o en su conjunto.
También tenemos el compromiso de alertar y aportar claridad a los mensajes erróneos, confusos o no científicos, que se difunden y que, muchas veces, se instalan como modas. Especialmente, cuando esos mensajes pueden fomentar enfermedades o situaciones no saludables en las personas.
La Argentina cuenta con Guías Alimentarias para la población que ofrecen recomendaciones en función de las enfermedades prevalentes de nuestro país, la disponibilidad y acceso a alimentos en las distintas regiones, y la evidencia científica que valida pautas alimentarias actuales para la prevención de enfermedades y promoción de la salud.
El Dr. Pedro Escudero, médico y profesor de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires, y por quien se celebra el Día del Nutricionista, trabajó fuertemente para instalar la idea del rol de la nutrición dentro de todos los procesos de salud y enfermedad, individuales y colectivos.
Por ello, vale la pena reivindicar las leyes de la nutrición que él mismo formuló, por su simpleza y su vigencia científica para la promoción de la salud. Las mismas establecen que la alimentación debe ser suficiente en calorías según las necesidades de cada persona, sea ésta adulta, adolescente, hombre o mujer; realice actividad física o desarrolle un trabajo con mucho desgaste corporal. Asimismo, promueven una alimentación que cubra todos los nutrientes necesarios: carbohidratos, grasas, proteínas, fibras, vitaminas y minerales, y que estos nutrientes estén distribuidos en las cantidades necesarias para que no exista ni déficit ni exceso, de alguno de ellos, procurando un equilibrio que potencie su función en el cuerpo.
La alimentación debe ser adecuada a cada persona teniendo en cuenta cuestiones personales como hábitos, cultura, gustos alimentarios, cuestiones económicas, o antecedentes familiares y personales en relación al padecimiento de enfermedades, entre otras.
Respondiendo a la pregunta inicial: ¿a quién consultarías para conocer sobre alimentación y nutrición? A lo largo del país, en muchos hospitales y consultorios, públicos y privados, los Licenciados en Nutrición son las personas más capacitadas para orientar y brindar información confiable y adecuada, a cada uno de los consultantes.
(*) Directora de la carrera de Licenciatura en Nutrición de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral.