Armados entraron a la casa del dueño de Radio La Bomba cuando la familia dormía
El hecho se registró en la madrugada de este jueves en la vivienda de Fabián Milone, en la ciudad de Villa Mercedes. Eran tres delincuentes armados los que violentaron la seguridad perimetral para tomar de sorpresa a los habitantes de la casa.
El caso de inseguridad lo vivió la familia del propietario de Radio La Bomba, una emisora con 17 años de trayectoria en esa ciudad.
Cerca de la 1:40 del jueves, todos dormían en la casa ubicada en el barrio Quintas de Betbeder, menos la esposa de Milone que se había levantado para tomar un vaso de agua. Fue ese motivo el que al final frustró una situación que pudo ser todavía peor.
La mujer fue la primera en advertir que tres hombres daban vueltas alrededor de la casa con armas en sus manos. Justo cuando ella llegó hasta el comedor, los ladrones estaban eligiendo el mejor lugar para meterse y sorprender a los dueños.
El miedo no paralizó a la mujer que corrió para alertar a su hijo mayor y a su marido en la planta alta. Cuando todos entendieron que estaban viviendo en carne propia la inseguridad que hace rato sacude a la provincia, llamaron a la Policía y pidieron auxilio.
"Me despierta mi señora desesperada por un movimiento extraño en la casa. Cuando bajo me encuentro con el show de esta gente intentando ingresar. Nunca prendí las luces de adentro porque no quería que nos vieran, pero nosotros con la iluminación que tenemos en todo el perímetro veíamos todos sus movimientos”, relató el empresario.
Ninguno de los que estaba en la casa podía imaginar hasta dónde iban a arriesgarse los asaltantes, que habían llegado hasta allí y que demostraban con su accionar que fácilmente no se irían. “Ellos ya sabían que estábamos adentro, ya nos habían escuchado hablar pero no se iban”, explicó para graficar que la escena los mantuvo en pánico un buen rato.
Al miedo se sumaron los nervios porque cuando llamaros a la fuerza de seguridad, Milone se encontró con un protocolo que lo puso a responder preguntas en medio de una situación que era extrema: “No digo que esté mal, solo que con eso se dilataba la situación y demoraba la llegada de los policías. Mientras yo hablaba con la mujer, los tenía a ellos a metros y seguían haciendo su trabajo. Fue todo raro, difícil y desesperante. En cualquier momento podía tenerlos encima, y en esos momentos uno piensa lo peor, no sabía qué podían hacernos”.
Los ventanales no tienen reja, pero afortunadamente los ladrones no pudieron abrirlos y tampoco rompieron los vidrios.
En su relato Milone recordó que los hombres (que no eran demasiados jóvenes) actuaron a rostro descubierto, que uno de ellos tenía un arma en la mano, y que los otros llevaban hierros, con los cuales posiblemente pretendían violentar las aberturas.
El empresario contó que el alivio de su familia llegó cuando los ladrones advirtieron que la Policía se acercaba: “Cuando vieron las luces azules escaparon juntos para un mismo lado”.
"Nadie está preparado para esto, y bueno me tocó a mí como ya le ha tocado a muchísima gente", se lamentó, y explicó que su vivienda está a 200 metros del Río Quinto, lugar que usan generalmente los delincuentes para esconderse y moverse.
“Siempre hay robos en todos lados. Meses atrás ingresaron a otra casa, las personas no escucharon y cuando despertaron los tenían en el dormitorio”, dijo para reflejar que el tema se ha vuelto una preocupación para todos los habitantes de la ciudad villamercedina.