La UNSL designó un equipo para aplicar el protocolo ante violencia de género
Las integrantes del equipo técnico interdisciplinario se incorporarán a sus funciones en septiembre.
La psicóloga Alejandra Ortiz Alarcón, la trabajadora social Candela Manrique y la abogada Luciana Banó integrarán el equipo encargado de aplicar el Protocolo de Intervención Institucional ante denuncias por situaciones de violencia de género, identidad de género y discriminación.
Las profesionales firmaron el contrato durante una reunión que mantuvieron con el rector de la Universidad Nacional de San Luis Félix Nieto Quintas, el secretario de Coordinación y Planificación Institucional y rector electo, Víctor Moriñigo y el responsable de las Políticas de Género de la Universidad, Claudio Lobo, informó la oficina de prensa. Empezarán el 2 de septiembre.
El rector consideró que la conformación del ETI es “un logro del Consejo Superior, de la comunidad que lo solicitó y fundamentalmente de las militantes que han logrado que la universidad tenga su Protocolo de Género”.
“Su aplicación permitirá que se sustancie el interés de todos los participantes de la comunidad y construir un mundo más solidario y un futuro mejor para los miles y miles de docentes, estudiantes y no docentes que diariamente contribuyen al engrandecimiento de la Universidad (…). Esperemos que sea el comienzo de un sitio más sólido de trabajo para la problemática de género en la Institución”, señaló Nietos Quintas.
Claudio Lobo afirmó que la designación del ETI constituye un paso fundamental que reafirma las políticas de género de la UNSL. “Con este nombramiento estamos en condiciones de poner en pleno funcionamiento el Protocolo contra las violencias de géneros en la Universidad, una decisión esperada por toda la comunidad universitaria», sostuvo.
Al mismo tiempo, Lobo destacó que en el marco de estas políticas han presentado a la secretaría de Políticas Universitarias (SPU) un proyecto de fortalecimiento del Protocolo y están avanzando en la implementación de acciones en el marco de la reciente adhesión a Ley Micaela.
El Protocolo
Tiene como objetivo prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género, identidad de género y discriminación en todas sus manifestaciones en el ámbito de la UNSL.
El mismo tiene alcance e involucra a toda la comunidad universitaria: estudiantes, docentes y no docentes, en todos los espacios, Institutos y unidades dependientes.
Los principios que orientarán su aplicación son asesoramiento y contención gratuitos, no re-victimización, discreción y confidencialidad, diligencia y celeridad.
La intervención comenzará en un ámbito específico de la UNSL a partir de la recepción de consultas o exposiciones de hechos de violencia de género, donde se desarrollarán las estrategias pertinentes para su abordaje y seguimiento.
Alejandra Ortiz Alarcón, señaló que desde que salió la convocatoria estuvo muy interesada en participar porque es un hito muy importante que va a impactar en las diferentes áreas.
Candela Manrique rescató la decisión política y el apoyo institucional desde donde podrán desempeñarse y abordar estas problemáticas.
“La universidad como institución central pública, ya no puede quedar exenta o ajena del abordaje de estas problemáticas. Esperamos hacer de esta casa un lugar más justo, libre, diverso y plural”, expresó
Luciana Banó resaltó que el objetivo de su función es aplicar el protocolo, concientizar, escuchar a todas las personas que están sufriendo diversas problemáticas reñidas con todas las leyes y los tratados internacionales que protegen a la mujer. A su vez tuvo en cuenta que es necesaria "la capacitación, escuchar y materializar las denuncias y cuestiones concretas para poder aplicarlo.