Familiares y vecinos de Jonathan Magallanes revivieron el asesinato

Este miércoles los vecinos del Barrio 200 Viviendas, ubicado al sur de la capital puntana, removieron los recuerdo del día que Jonathan Magallanes, de 18 años, fue asesinado de un disparo en el Barrio 200 Viviendas.

La medida fue encabezada por el juez N°1 Marcos Flores Leyes y participaron funcionarios de su juzgado, personal de las divisiones Homicidios e Investigaciones de la Policía de la Provincia, y los abogados de las partes, quienes al final destacaron que el procedimiento "útil y positivo".

Se trató de una inspección ocular requerida por Jorge Merlo, defensor de Luciano Emanuel Velázquez (25), uno de los detenidos por el crimen ocurrido el pasado 4 de octubre. En ese sentido las autoridades desarrollaron pericias de todo el contexto y las circunstancias que pudieron desencadenar el asesinato.

Si bien el proceso fue de participación estrictamente judicial, fue inevitable que los familiares de Magallanes y otros vecinos se acercaran para seguir de cerca lo que estaba pasando.

A las 18:10 comenzaron a llegar los abogados y pasadas las 18:30 comenzó el operativo que consistió en la recolección de datos técnicos. Motoristas del DRIM interrumpieron el tránsito en intervalos, para que las autoridades trabajaran con tranquilidad sobre el lugar.

El procedimiento

El despliegue se concretó entre la manzana C y D del barrio. Ese fue el sitio donde Magallanes recibió el impacto de un arma de fuego: un descampado situado a unos 300 metros de la circunvalación que conecta con el Barrio 500 viviendas.

En las casas colindantes se ven los graffitis que dicen “Jonita” acompañado con el signo de “los cinco puntos tumberos”, tal como se lo conoce en la jerga. En el poste de luz que se encuentra en la esquina de donde sucedieron los hechos, también hay una cruz.

Cuando comenzaron a llegar los abogados, la gente de la zona salió de sus casas y prestó atención a todo lo que ocurrió. La mayoría gesticulaba como explicando aspectos de la muerte.

Este medio intentó dialogar con los presentes para obtener testimonios, pero dijeron que por “miedo” no podían hacerlo.

Por otro lado, mientras la Policía ejecutó el procedimiento, también se congregaban para mirar desde lejos los vecinos del barrio Néstor Kirchner.

De las actuaciones se desprendieron detalles técnicos específicos, distancias, altura y composición del terreno; también luminosidad y todas las precisiones que hacen a la reconstrucción de los hechos.

“Fue bastante satisfactoria la inspección. No dan los parámetros de disparo en el lugar que cayó el chico, la distancia, la altura, estamos un metro más abajo y como la bala ingresa desde arriba y se aloja en la columna, no se puede producir (el disparo) desde una moto para que tenga dicha dirección”, sostuvo Jorge Merlo.

En este sentido aseguró que su defendido “no disparó el arma”. Si bien no cuenta con una guía que le genere alguna hipótesis de lo que podría haber sucedido, está seguro de que las circunstancias “no son como redacta el testimonio ocular de la gente”.

En la misma línea de argumentos su par Ricardo Gutiérrez Esley, quien defiende a Rodrigo Tejeda (22) señaló que “no se sabe quién lo asesinó”.

“No quisiera alimentar conjeturas, pero suscribo a la palabra de Merlo, mi cliente menos fue el que disparó. Es imposible técnicamente que se haya propinado desde este sitio la bala por el ángulo de entrada, eso es verdad absoluta”, dijo.

“Pedí esta medida porque una cosa es resolver con los papeles y otra ver el lugar (…) hay testigos que dicen que Velázquez es quien dispara y cuando esta defensa pregunta con qué mano, contestan que no lo vieron, y cuando se interroga si lo observaron disparar, dicen que no (…) esta inspección nos dejó fuera de foco porque no conocíamos el lugar y ahora estoy convencidísimo que no pudo disparar”, añadió el defensor.

Por su parte el abogado de la familia de Magallanes, Cristóbal Alex Ibáñez contradijo los dichos de sus colegas. Reconoció que la medida fue de utilidad: “Fue muy positivo para que todo lo que declararon los testigos, que ha sido preciso y conciso, pueda culminar”.

“Esa pericia que refirieron (los abogados) no está agregada en la causa. El juez tiene que resolver con lo que está agregado, por lo que se ve acá y lo que manifestó, dentro de dos días tendremos resolución, estoy convencido que los van a procesar a los tres por los delitos que fueron llamados a declarar”, agregó.

Por último describió que fue importante reconocer la iluminación del barrio ya que permitió ver con claridad a los testigos y en ese sentido resaltó que a ninguno se les pidió el falso testimonio, que es lo primero que se solicita cuando se sospechan este tipo de declaraciones.

El crimen

Magallanes falleció el 4 de octubre en un marco terrible. El joven había regresado de la casa de su novia y luego salió a comprar con un amigo, en ese instante fue atacado; recibió un disparo mortal en el pecho.

Según la autopsia, murió por una “hemorragia inatratorácica aguda debido a una lesión pulmonar como consecuencia del pasaje de proyectil de arma de fuego”.

Iván Federico “Chuqui” Soria, Rodrigo “Igo” Tejeda y Luciano Emanuel Velázquez están detenidos por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”. En las próximas horas el juez deberá resolver la situación procesal de los tres.