No hay guardavidas en los diques de San Luis: una necesidad que siguen sin tener en cuenta

Según confirmó la entidad, en lo más reciente San Luis Agua se comprometió a “exigir” a todos los predios instalados alrededor de los diques (que están habilitados para el acceso a bañistas) que pongan bollados y un guardavidas profesional con título. “Por ahora tenemos ese compromiso, esperemos que se cumpla”, dijo el secretario general del Sindicato de Guardavidas de San Luis, Juan Worman en diálogo con El Chorrillero.

Los únicos lugares que cumplen a “rajatabla” y contratan a los guardavidas son los complejos de piletas situados en la capital de San Luis, Juana Koslay, Villa Mercedes y Merlo.

El déficit, como todos los años, se da alrededor de los diques donde la gente acude para bañarse, y donde como muestra la realidad al menos en la mayoría de las zonas más concurridas, no hay personal que custodie o asista ante emergencias.

Worman, que además está a cargo de la Escuela, dio detalles de cómo es la situación en el arranque del 2020 y de la importancia que tiene la presencia de rescatistas en los lugares dedicados a la actividad acuática.

En San Luis (donde hay 20 diques) funciona la Escuela de Guardavidas, y desde hace 11 años trabaja en la capacitación y preparación de especialistas para trabajar en lugares acuáticos.

La entidad ya dio 200 egresados como de guardavidas profesionales y en marzo se recibirán otros 22.

Dijo que muchos predios, como los campings y las piletas que rodean los diques de la provincia “no tienen guardavidas”.

“Prefieren tomar el riesgo de que se ahogue alguien, antes de pagarle el sueldo a una persona capacitada. Y eso es una barbaridad porque estamos hablando de vidas”, apuntó en declaraciones a El Chorrillero.

“Algunos camping se escudan con poner un cartel que diga prohibido bañarse y así evitar pagarle a un profesional, pero la gente se baña igual”, detalló.

También consideró que el tema debería planificarse a la hora de que se habiliten los diques. “La seguridad de poner un bañista para la gente que se baña o los que realizan deportes acuáticos con fines recreativos o terapéuticos, tiene que estar”, insistió.

Explicó que hay muchas piletas que vienen trabajando “hace años” sin guardavidas y “tuvieron suerte de que no pasara nada”.

“Pero la suerte en algún momento se acaba y puede suceder (porque es algo normal) que se ahogue alguien por distintas situaciones. Este problema es para que tomen conciencia porque está en juego la vida de las personas”, añadió.

Recordó que la Escuela presentó un proyecto en la Legislatura para que sea ley y que los espacios acuáticos cuenten con un profesional para que actúe en los casos de emergencias. Sin embargo no hay avances en el tema.