Inseguridad que mata: “Se robaron la vida de un buen vecino por un poco de plata”
Tras el homicidio de José Garro, los vecinos del Barrio San Martín expresaron su dolor y preocupación. Piden mayor seguridad y presencia policial porque “temen” que los delincuentes puedan ingresar a las viviendas. Los delitos se incrementaron en los últimos meses.
En sólo 40 días, la inseguridad se cobró su segunda víctima en la ciudad de San Luis. A José Garro de 70 años lo mataron de una apuñalada durante un robo, en la mañana de este lunes. El delincuente, de 16 años, ingresó a la vivienda del hombre, que se encontraba junto a su esposa.
El hecho ocurrió alrededor de las 6 en una casa ubicada sobre calle Paraguay, en el Barrio San Martín. Cuando la Policía llegó al lugar encontró a Garro tendido en el piso de un pasillo, boca arriba. El escenario advirtió a los efectivos que la muerte había sido violenta. Y más tarde la autopsia confirmó que la causal del fallecimiento fue un shock hipovolémico, causado por la herida de un arma blanca.
La tragedia provocó angustia entre los habitantes de la zona, no solo porque la delincuencia se llevó a un vecino sino porque desde hace un tiempo venían advirtiendo un aumento en los ilícitos.
“El barrio ha dejado de ser tranquilo. Hace varios meses que ya no podemos estar de tanta inseguridad”, sostuvo una de ellas, Elisabeth Aballay.
“Se robaron la vida de un buen vecino por un poco de plata o algo de valor para sustentar sus necesidades de droga. Por eso estamos tan mal”, subrayó.
En declaraciones a El Chorrillero, la mujer explicó que los hechos se producen a cualquier horario. “A algunos les han robado a las 17”, ejemplificó.
El barrio es uno de los más antiguos de la ciudad. Y por eso una de sus características es que gran parte de los habitantes son adultos mayores. “Todos estamos muy mal, los vecinos más grandes están muy asustados”, alarmó.
Señaló además que debido a la cuarentena “las calles están vacías”, y que en los últimos días “la Policía no ha efectuado recorridos”.
En la tarde del lunes, la Policía detuvo como principal sospechoso del homicidio de Garro a un adolescente de 16 años. La aprehensión se produjo en la calle Libertad, entre Santa Rosa y Eva Perón, cuando el joven viajaba como pasajero en un taxi.
Tras esto, la investigación que inició el juez Penal N°2, Ariel Parrillis pasó a manos de la jueza de Niñez y Adolescencia, Daniela Benenatti.
La Policía no informó en detalle cómo fue el robo que sufrió Garro. Si embargo trascendió que el delincuente habría ingresado a la vivienda por la parte trasera, y una vez adentro se apoderó de un anillo de oro de Garro y prendas de vestir; pero antes de escapar hirió de muerte al dueño de casa. La esposa de la víctima, según se supo, también resultó lesionada.
El sospechoso se encuentra ahora alojado en la Comisaría del Menor hasta que se resuelva su situación procesal. Este miércoles será citado a indagatoria por Benenatti.
El pasado 3 de marzo, la capital puntana también se vio conmocionada por el asesinato de la docente Mónica Ramos. El cuerpo de la docente fue hallado en su vivienda en la calle Belgrano. También fue apuñalada. Tras herirla, el autor del hecho incendió la casa y escapó en el auto de la mujer. El vehículo apareció casi 24 horas más tarde en Balcarce a la altura del 500.
Cinco días más tarde detuvieron al principal sospechoso, Héctor Federico Núñez de 32 años, quien luego fue procesado por “homicidio criminis causae” y trasladado al Servicio Penitenciario provincial. La hipótesis es que mató a la psicopedagoga para ocultar otro delito que sería un “robo”.