Advierten sobre el incumplimiento de normas, ausencia de controles y falta médicos en geriátricos
El secretario adjunto de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) San Luis, Gerónimo Ortíz advirtió sobre el difícil panorama que viven los adultos mayores en medio de la pandemia por el coronavirus. Dice que pese a los avisos, el Gobierno "hace oídos sordos”.
En el reporte diario epidemiológico del pasado jueves para informar el avance del Covid-19, la Provincia salió a manifestar su “alta preocupación” por la población de la tercera edad y a decir que la presencia de la salud pública en los geriátricos “es importante”.
Tras estas declaraciones, desde el gremio de ATSA manifestaron otra realidad que hoy por hoy atraviesan estas instituciones a lo largo de San Luis.
En declaraciones a El Chorrillero, Gerónimo Ortíz fue crítico sobre el rol del Gobierno y puntualizó irregularidades como la contratación del personal médico, la infraestructura y las habilitaciones gubernamentales por parte de las residencias.
“Existen normas que impone el cuerpo de trabajo en esos lugares. Debe haber un especialista en gerontología, personal de enfermería, asistentes geriátricos, cocinera, mucamas, todo, y no se respeta de ninguna manera”, afirmó, y señaló que los tratamientos médicos “son realizados por personal que no está preparado".
Otro de los graves problemas “de toda la vida” que se debe resolver son las condiciones en las que viven los ancianos.
“Deben tener piso antideslizante, acceso para aquellos que tienen silla de ruedas o bastón, baños con las medidas de seguridad pertinentes y no hay nada de eso”, sostuvo.
“A veces la mucama es la que hace de todo porque no hay asistencia médica continua, cualquier persona les administra los medicamentos”, completó.
Desde el Estado provincial sostuvieron que desde el inicio de la pandemia, “se ha tenido una mirada especial sobre este grupo vulnerable”.
Según se dio a conocer, hay más de 30 asilos habilitados repartidos por toda la provincia y otros realizando el proceso para abrir sus puertas.
El encargado de controlar el acatamiento de las medias sanitarias es el ministerio de Salud a través del área de fiscalización.
“La idea es poder cuidar al adulto mayor que se encuentra en estas instituciones. Se ha trabajado en el control de las visitas para evitar que el virus ingrese, después en implementar las medidas de higiene personal y del ambiente, además, de los planes de vacunación. Se está fiscalizando para ver que se cumplan con todas las normativas”, sostuvo Graciela Sarmiento responsable del protocolo Covid-19 para San Luis la semana pasada en una intervención en los medios oficiales.
Pero Ortíz manifestó que “no se realiza esta función”.
“Lo que hacen raya con una acción penal, por el mal desempeño de la función pública, es decir, hay una verdadera estafa, no solo económico, sino moral, ética y profesional”, puntualizó.
Los planteos y las advertencias son constantemente elevadas a la Casa de Gobierno. “Venimos planteando la deplorable situación de los geriátricos desde hace tiempo y poca importancia nos dieron”, se quejó Ortíz.
Los geriátricos constituyen uno de los lugares donde se encuentran los pacientes con el mayor riesgo a la hora de contraer coronavirus. En la Argentina hubo 133 casos positivos de coronavirus y 7 muertes.
El primero de ellos ocurrió el 26 de marzo en Villa Luro de la ciudad de Buenos Aires. Allí el SAME evacuó a 40 personas que residían en el geriátrico Modelo Cervantes, luego de que una paciente de 82 años falleciera por coronavirus en el Hospital Italiano, donde había sido trasladada. Otras tres personas que no estaban contagiadas murieron.
Los casos también tuvieron lugar en el interior. El pasado jueves se confirmó la cuarta muerte en un geriátrico de Saldán, Córdoba, donde también hay 66 infectados. En Rosario, 30 adultos mayores están aislados luego de que una enfermera del Hospital Geriátrico Provincial diera positivo.
Es por ello que a nivel local el foco también está puesto en las residencias.
“Los problemas se agravan a partir de la pandemia, pero esto viene desde hace muchísimo tiempo a esta parte, ahora hay un peligro mayor y resuelven sobre la marcha”, finalizó Ortiz.
El último fin de semana la Policía dio a conocer que una anciana murió ahogada en una pileta en un geriátrico de Juana Koslay.