Un estudio detecta coronavirus en el semen de pacientes
Estudio advierte que evitar el contacto con saliva y sangre del paciente puede no ser suficiente. La supervivencia del Sars-CoV-2 en el semen, incluso de pacientes en recuperación, mantiene la probabilidad de infectar a otros. Antecedentes abren la discusión sobre cómo prevenir y controlar el Covid-19, y el uso de condón.
Desde que en diciembre de 2019 se detectó el brote de neumonía con características desconocidas, que luego se asoció a Covid-19, en la ciudad de Wuhan, China, los científicos se enfocaron en conocer sus vías de transmisión. Se trataba de un conocimiento urgente: se extendía con inusual rapidez en otras partes de China y en el extranjero.
Estudios posteriores confirmaron que Covid-19 se caracteriza por una transmisión de humano a humano. La principal vía es la respiratoria, a través de gotitas o por el contacto con superficies contaminadas por el virus. Otras rutas de contagio requieren mayor verificación, advierten los científicos.
Hasta ahora los hallazgos confirman que el virus puede vivir en algunas superficies por muchas horas, incluso durante tres días. También que puede permanecer suspendido en pequeñas gotas en aerosol durante unos 30 minutos.
Pero al parecer eso no es todo. Recientes estudios plantean la posibilidad de podrían existir otras vías de contagio. En esa línea, una investigación detectó que el coronavirus puede infectar células del intestino y multiplicarse en ese órgano, lo que explicaría la presencia de Covid-19 en heces.
Sin embargo, poco se sabía sobre de la presencia de Sars-CoV-2 en el semen. Ahora un nuevo estudio desarrollado en China, detectó que el virus o partes de él, pueden permanecer en el semen. Investigación desarrollada por Weiguo Zhao del Octavo Centro Médico del Hospital General del Ejército Popular de Liberación de China en Beijing y Shixi Zhang del Hospital Municipal Shangqiu en Henan.
El estudio, Características clínicas y resultados de las pruebas de semen entre hombres con enfermedad por coronavirus 2019, publicado el 7 de mayo, en JAMA Network Open, revista médica de acceso abierto revisada por expertos, consideró a 38 hombres, 23 de ellos (60,5%) habían logrado la recuperación clínica y 15 (39,5%) se encontraban en la etapa aguda de la infección.
Los resultados de las pruebas de semen que les realizaron a los pacientes encontraron que 6 (15,8%) tuvieron resultados positivos para Sars-CoV-2. De ellos, cuatro estaban en la etapa aguda de la infección y 2 se estaban recuperando, un resultado que los investigadores resaltan como “particularmente notable”.
En los hallazgos, no se detectaron diferencias significativas para los pacientes por edad. Tampoco influencia de antecedentes de enfermedad urogenital, días desde el inicio de la enfermedad, días desde la hospitalización o días desde la recuperación clínica.
El estudio determinó que el Sars-CoV-2 puede estar presente en el semen de pacientes con Covid-19, pero que además que puede detectarse en el semen de pacientes en recuperación. “Debido a las imperfecciones de los testículos sanguíneos, deferentes, epidídimo, el Sars-CoV-2 podría ser sembrado en el tracto reproductor masculino, especialmente en presencia de inflamación local sistémica”, detalla.
Incluso si el virus no puede replicarse en el sistema reproductor masculino, indican, puede persistir, posiblemente como resultado de la “inmunidad privilegiada de los testículos”. Esto se refiere a que dentro de los testículos, la respuesta inmune está restringida para permitir la supervivencia de los espermatozoides, que son inmunogénicos. El virus también puede transmitirse al semen como resultado de la supervivencia y la replicación dentro de las glándulas accesorias
Transmisión sexual
Claudia Cortés, infectóloga del Departamento de Medicina Interna de la Universidad de Chile, explica que hasta ahora se ha estudiado la presencia del virus en varios fluidos, como en orina y en deposiciones, y en estas últimas se ha logrado asilar, “pero no se ha logrado aislar masivamente en sudor ni en lágrimas”.
El reporte de la aparición ahora en semen, explica Cortés, requiere una segunda fase para ver si el virus tiene la capacidad de infectar. Porque los virus son parásitos celulares que necesitan infectar una célula para multiplicarse, entonces que haya una PCR positiva en semen da cuenta de que hay presencia de material genético, "pero lo que hay que estudiar ahora es si uno puede rescatar ese virus y ver si es infectante, y eso sí abría la puerta a la posibilidad de transmisión sexual”, destaca.