La Cámara de Comercio transmitió preocupación por la presencia de vendedores ambulantes

“No cumplirían mínimamente con las condiciones que nosotros hemos debido sortear para poder reabrir las puertas”, cuestionó el presidente de la Cámara de Comercio de San Luis, Vito Carmosino. Consideró que habilitar los puestos de venta en la calle podría llevar a “perder el estatus sanitario que se ha logrado”.

A través de las plataformas virtuales, Carmosino y el responsable de la CAME Joven, Emmanuel López mantuvieron un contacto con los concejales del bloque San Luis Unido. Uno de los puntos centrales que abordaron fue la presencia de los vendedores ambulantes en la ciudad San Luis.

“Estuvimos hablando sobre los comercios instalados en el Paseo de Padre. Están en una forma muy irregular, más teniendo en cuenta la pandemia”, puntualizó Carmosino en declaraciones a El Chorrillero.

Fundamentó que esa modalidad de comercialización en veredas, plazas o paseos no cumplen con “protocolos y requisitos” que debieron cumplimentar los negociantes ante el Gobierno provincial para “mantener el estatus sanitario”.

A raíz de ello, transmitió la “preocupación” del sector en el caso de la Municipalidad continúe permitiendo esas actividades e insistió que “está en contra” de lo que solicita el Comité de Crisis.

“Hicimos saber al Concejo Deliberante que deberá arbitrar los medios para que ese tipo de actividades no se desarrolle en los espacios públicos, veredas, plazas ni paseos”, planteó el dirigente.

En el encuentro virtual estuvieron presentes los ediles Guillermo Araujo, Javier Suárez Ortiz, Celeste Aparicio, Ailén Chaine y Otoniel Pérez Miranda.

“Desde la Cámara no nos oponemos que la gente trabaje, pero en esas condiciones no porque nos perjudicaremos todos”, advirtió Carmosino. Y mencionó que han tenido conversaciones con el municipio “para que se les otorgue un espacio cubierto donde desarrollar su actividad”.

En la misma línea, resaltó la prohibición de “ejercer cualquier tipo de actividad que no esté normada con respecto a los protocolos y al estatus sanitario”. Consideró que los vendedores ambulantes “tienen derecho a trabajar también pero en equidad e igualdad”.

“Hay muchos locales comerciales que a pesar de haber tenido situaciones de formalidad no pueden abrir sus puertas por algún inconveniente. No se puede permitir que ese tipo de negocios puedan desarrollar su actividad libremente sin cumplir casi nada de lo que nos piden a nosotros”, cuestionó.

Por otro lado, aseguró que la venta ambulante los perjudica en sus ingresos porque “es una competencia desleal e ilegal”. “La mayoría por no decir todos de esos productos que comercializan son de dudosa procedencia”, finalizó.