Romero: “El kirchnerismo tiene una agenda paralela al Covid: la del revanchismo y la venganza”
En el marco de la última sesión del Senado, el legislador por Salta apuntó contra el sector del oficialismo. Aludió a Adolfo Rodríguez Saá que está encolumnado detrás de la vicepresidenta, Cristina Kirchner.
La polémica sesión de la Cámara de Senadores en la que se trató y aprobó un proyecto de creación de una comisión bicameral que investigue a la empresa Vicentin sigue recibiendo cuestionamientos.
Con reclamos y una fuerte discusión de por medio, el Frente de Todos logró una mayoría simple y votó la media sanción a la iniciativa con 41 votos a favor contra 29 en contra. Bloques de la oposición insisten que el proyecto no sea girado a Diputados porque no se alcanzaron los dos tercios necesarios y quedó rechazado, de acuerdo al reglamento interno.
Uno de los puntos más álgidos del debate fue el momento de la intervención del salteño, Juan Carlos Romero, presidente del bloque Federal, cuando apuntó contra el kirchnerismo.
"Traza una agenda con mucho revanchismo y deseos de venganza”, destacó.
“Buscan profundizar la grieta, de ofender, de atacar al que no piensa igual. Nada tiene que ver con lo que muchos argentinos queremos que sea un país normal, que se respeten las instituciones, la división de poderes, el federalismo y la ley”, sostuvo en su intervención.
El principal cuestionamiento que se hace hincapié desde la oposición es que la propuesta está por fuera del acuerdo reglamentario para las sesiones remotas. Estas indican que solo se pueden tratar temas vinculados a la pandemia del coronavirus.
La propuesta había tenido dictamen la semana pasada en la comisión de Asuntos Constitucionales, gracias a las firmas del FDT y Juntos Somos Río Negro, un bloque aliado.
“Podríamos crear una para investigar la muerte del fiscal (Alberto) Nisman, para investigar el tratado con Irán o las empresas de Lázaro Báez, pero no, confiamos en la Justicia, que lo está tratando y analizando, en los tiempos que muchas veces nos quejamos”, planteó en la exposición de más de 16 minutos.
Otro aspecto que abordó fue el que, para crear una nueva bicameral, es necesario contar con mayoría especial.
“Me dirán que muchas comisiones se crearon por ley, pero yo no encontré ninguna que no fuera por absoluta mayoría, dos tercios o unanimidad. Este proyecto apresurado, lleno de prejuzgamientos y ocupándose de un tema que no le corresponde al Congreso sino a la Justicia, va a tener una mancha por haber infringir el reglamento y el acuerdo de las sesiones”, manifestó.
En este sentido, el legislador aseguró que se olvidan de “otra crisis para atender” y es la económica: “Muchos ciudadanos no quieren saber de la grieta, ni nada de eso, la gente quiere trabajar, producir, cumplir con sus obligaciones, sin que les cambien todos los días las reglas de juego”.
La bicameral en cuestión, estará integrada por seis diputados y seis senadores y funcionará por 18 meses (prorrogable por otros seis).
¿El fin? Investigar "presuntas irregularidades que pudieran existir en la relación crediticia entre el Banco de la Nación Argentina y la empresa Vicentin S.A.I.C., posible defraudación y estafa comercial a acreedores, clientes de la firma y/o empresas de Cereales y Soja con las que competía".
Además, deberá observar y detectar “posibles operaciones de encubrimiento y/o lavado de activos que pudieren ser de origen delictivo y la responsabilidad de la Unidad de Información Financiera (UIF) por incumplimiento en sus obligaciones de control".
“No nos va a llevar a ningún camino de concordia (la ley), de consenso y normalidad. Estoy seguro que la agenda del kirchnerismo existen cientos y miles de proyectos parecidos que nos van a entretener y que nos van a hacer querer olvidar de la crisis del país”, señaló Romero.
Siguiendo con la alocución, dio cuenta de "presiones que lleva a cabo un sector del oficialismo” hacia el presidente Alberto Fernández.
“Presionan para generar batallas épicas con enemigos imaginarios que ellos encuentran, como los medios de comunicación, los jueces que no son amigos, el pasado, contra los empresarios y contra nosotros en el Senado que no podemos ni opinar en las comisiones”, indicó.
Por otro lado, se dirigió a legisladores de ambas cámaras “provenientes de provincias productivas con muchas empresas pymes que están al borde de la desaparición”.
“Debemos estar ocupándonos del futuro de ese sector productivo de esos lugares y no andar analizando la conducta de los directivos de Vicentin que para eso ya hay un concurso”, puntualizó.
Sobre el final, lamentó el acompañamiento por parte de un sector del peronismo a la norma. No lo nombró, pero aludió con la reflexión a Adolfo Rodríguez Saá que con su propuesta sobre el caso Vicentin asumió una posición funcional al kirchenerismo.
“Muchas de estas acciones cuentan con el apoyo, el silencio de peronistas, gobernadores, ex gobernadores, legisladores de ambas cámaras, que seguramente saben que no es la agenda de la gente, la que se necesita y que en sus provincias se ven otras cosas. Es un juego peligroso y hay tiempo todavía para que la razón sea más fuerte que la obediencia”, cerró.
Diferentes bloques de la oposición acusaron a Cristina Kirchner de haberles cortado los micrófonos tras la votación.