Lilian Videla: “En nombre de la pandemia hubo muchos abusos, cotidianamente recibimos llamados”
La referente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de San Luis cuestionó el accionar de la fuerza de seguridad provincial. “Los suicidios así de fácil como los describe la Policía son imposibles”, subrayó.
“Son dos hechos por demás sospechosos. No deberían ni pueden ocurrir. Hay una responsabilidad política de esto”, sostuvo Lilian Videla, en referencia a las muertes en comisarías de Florencia Morales y Franco Maranguello.
En declaraciones a El Chorrillero por CNN Radio San Luis, Videla abordó el reciente pronunciamiento de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos a nivel nacional y a la intervención de la Oficina Regional para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Planteó que al tomar conocimiento de los hechos, desde la APDH San Luis solicitaron audiencia en dos oportunidades al jefe de la Policía, Darío Neira, pero no fueron recibidos. “Ahí empezamos a entablar contacto con instituciones fuera de la provincia porque acá no teníamos ninguna posibilidad de llegar al poder político”, afirmó.
En ese sentido, aseveró: “Los suicidios así tan fácil como los describe la Policía son imposibles y también ocurren en la Penitenciaria”.
La referente del organismo en San Luis cuestionó que el menor de 16 años fuera detenido cuando se encontraba en la puerta de su vivienda. “¿Por qué no tocaron el timbre y se lo entregaron a la madre?”, cuestionó.
Agregó que a raíz de ello, pidieron que las comisarías tuvieran cámaras y que las personas no fueran aprehendidas “por cualquier cosa”.
“La detención sólo puede ser con una orden judicial. Pueden tomarte los datos pero no hacerte permanecer”, subrayó.
Respecto a la muerte de Morales, en la seccional de Santa Rosa del Conlara consideró que las explicaciones del gobernador Alberto Rodríguez Saá (de que la muerte no fue causada por las medidas dispuestas) “son increíbles”.
Videla sostuvo que no se han agudizado los hechos de violencia sino que el escenario “viene de la época de la dictadura”. Sin embargo, expuso que “en nombre de la pandemia hubo muchos abusos”.
En otro tramo de la entrevista hizo alusión a la relación con Rodríguez Saá: “Tenemos una larga y enfrentada historia. El actual gobernador en el año 1978 pidió a (Emilio) Massera que le diera un castigo ejemplar al doctor Julio Suárez. Hoy está muerto. A partir de ahí no hemos tenido nunca diálogo con el Gobierno ni lo vamos a tener obviamente”.
Advirtió que las dos muertes fueron “los hechos más terribles” durante la pandemia, pero que “cotidianamente hay un llamado diciendo que los detuvieron, los maltrataron, llevaron a las comisarías y tuvieron 24 horas, que a las mujeres a veces las desvisten para tomar la identidad y eso está prohibido”.
Mencionó un operativo realizado en el Barrio Vecindad donde “entraron a un merendero y se llevaron la leche y el azúcar de los pibes”.
“Los casos de Florencia y Franco son consideramos crímenes de estado porque se cometieron en una institución pública que es la Policía. No vale sólo separarlos del cargo, (los policías) tendrían que estar con prisión preventiva por lo menos. Y deberían haber facilitado la autopsia. Los efectivos son funcionarios del Estado”, finalizó.