Una jubilada quedó varada entre San Luis y La Pampa
Una adulta mayor, oriunda de Santa Rosa, quedó varada ayer miércoles a la mañana, alrededor de siete horas entre el puesto caminero de Casimiro Gómez, (el arco) en la provincia de San Luis, y un puesto sanitario y policial ubicado en el territorio pampeano, pero a pocos metros del control puntano. Finalmente pudo ingresar a Rancul.
Las autoridades policiales de La Pampa y las de San Luis dejaron varada en el límite durante todo ese lapso a la jubilada, de profesión docente, que viajaba sola dentro del automóvil.
Los efectivos policiales pampeanos no la dejaban ingresar, y los puntanos tampoco le permitieron regresar a la ciudad de Santa Rosa de Conlara, desde donde había partido.
El episodio se produjo ayer, alrededor de las 11 de la mañana, en la ruta nacional 188 distante a 80 kilómetros al oeste de la localidad de Realicó. Según fuentes consultadas la mujer identificada como Graciela Beatriz Mendoza, con domicilio en Santa Rosa que tendría problemas de salud y que estaría medicada sacó un permiso el pasado 4 de julio para viajar hasta la provincia de San Luis. Ayer dicha autorización se vencía, con lo cual comenzó el regreso y la «pesadilla».
A pesar que en la zona no hay señal de telefonía, muy poca y según las condiciones climáticas se comunicó con el hermano. A partir de ese momento el hombre se comunicó con un amigo de Rancul para encontrar la solución.
Luego de varias idas y vueltas, y con la intervención de la directora el hospital José Padros, se solucionó para del problema.
Pasada las 18 horas, la mujer llegó hasta el centro asistencial, donde recibió atención médica y luego derivada a un hotel de Rancul. Ahora las autoridades tendrán que determinar si puede continuar viaje hacia Santa Rosa, hacer la cuarentena o si queda en el hotel durante los 14 días que señala el protocolo. Publicó La Arena.com.ar