Tras un paro de 25 días, volvió el servicio de transporte público en la ciudad de San Luis
Más de tres semanas pasaron desde que la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) iniciara una medida de fuerza que dejó a miles de usuarios sin servicio de Transpuntano.
El reclamo obedeció a que 334 trabajadores de la compañía municipal no habían cobrado el sueldo de junio, y el Sueldo Anual Complementario (SAC).
El viernes el intendente Sergio Tamayo y el gerente de la compañía Claudio Grippo se reunieron con dirigentes del gremio. Luego de eso dieron a conocer que la comuna había hecho una “gestión fantástica” para levantar la medida de fuerza.
Este sábado las unidades salieron otra vez a la calle.
Al comienzo de la “retención de tareas”, Grippo adjudicó la crisis financiera a la baja en la recaudación que produjo el parate por la pandemia en San Luis. Dijo que no tenían recursos para afrontar los pagos y que requerían $25 millones. Afirmó que dependían de los subsidios de Nación.
Días más tarde, depositaron alrededor de $5 millones, lo que equivalió a unos $15 mil para cada trabajador. El 24 de julio volvieron a depositar otra suma, pero solo alcanzó al 74% del total. Por eso, ratificaron el paro.
Durante todo el reclamo, no hubo algún tipo de respuesta o acción concreta de parte de Tamayo. Solo pidió disculpas a los trabajadores y usuarios, y se reunió en una oportunidad con la UTA.
Asimismo, descartaron que la solución pudiera provenir de la Provincia. Y no informaron si habían pedido asistencia, créditos o auxilio para llevar una respuesta a los miles de vecinos que dependen del servicio público.
Mientras tanto, los usuarios debieron afrontar fuertes costos para trasladarse a sus trabajos, o para asistir a cobrar, hacer las compras y al médico. Los taxis y remises compartidos fueron una alternativa. Otros no tuvieron más opción de caminar.
En simultáneo, los choferes realizaron protestas, marchas y ollas populares. Tuvieron que pedir dinero prestado o dejar de pagar tarjetas e impuestos. La falta de alimentos para sus familias agravó la preocupación.
Tras el anuncio del viernes, el secretario General de la UTA, Iván Piñeyro dijo estar “contento” porque pudieron llegar a un “acuerdo”.
“Es lo que venimos planteando a las autoridades provinciales, municipales y hasta en el Concejo Deliberante. Tratar de buscarle una solución para no volver a parar el servicio y que no nos vuelva a suceder lo mismo”, planteó el gremialista.
A su vez, transmitió que Tamayo les garantizó la continuidad de “un plan de trabajo para que no vuelva a ocurrir lo mismo”.
Por su lado, el servicio interurbano provincial tuvo que atravesar varias medidas de fuerza. Del mismo modo, miles de usuarios se vieron afectados en sus actividades diarias.
Pese a ello, y a que el servicio no está del todo normalizado, no hubo intervención de parte del Gobierno de Rodríguez Saá. Las empresas enviaron múltiples notas pidiendo asistencia a la Provincia, pero no tuvieron contestación favorable.