En un trámite exprés, senadores albertistas aprobaron las cuentas en rojo en casi $6 mil millones del Gobierno
Por imperio de la mayoría absoluta que mantiene en el cuerpo senatorial, el gobernador Alberto Rodríguez Saá se aseguró la sanción definitiva de la rendición de 2019 que exhibe un déficit fiscal y fue cuestionada por falta de transparencia.
En un trámite exprés, este martes la Cámara de Senadores aprobó por mayoría las Cuentas de Inversión que reflejan los gastos que llevó adelante la administración de Alberto Rodríguez Saá durante el año electoral.
El oficialismo no tuvo problemas para conseguirlo debido al control casi total que mantiene dentro del recinto. Si se tiene en cuenta que la Cámara de Diputados fue testigo de una sesión maratónica de ocho horas para obtener la media sanción, el tratamiento ahora fue relámpago.
Fue avalado por siete votos contra el único representante de la oposición, Sergio Guardia (San Luis Unido – Junín). María Angélica Torrontegui, Mabel Leyes, Damiela Freixes, Pablo Garro, Diego García, Daniel Camilli y Marcelo Debandi (Frente Unidad Justicialista) levantaron la mano para completar el trámite.
Quienes no acudieron fueron el vicegobernador y presidente de la Cámara, Eduardo Mones Ruiz y el senador del PJ por Pedernera (denunciado por múltiples delitos), Ariel Rosendo.
Uno de los principales puntos que arroja las Cuentas de Inversión es un déficit de $5.401 millones y un déficit financiero de $5.627 millones (cerca de un mes y medio de recaudación aproximadamente). Se trata de un 12,29% de todos los recursos de la administración central.
El desequilibrio entre gastos corrientes y de capital es otro índice a tener en cuenta: el primero llegó a 59,91% mientras que el segundo a 39,89%.
Por otra parte, los recursos previstos en el Presupuesto del 2019 ascendían a $39.103 millones y los percibidos fueron a $45.791 millones, un 17,10% por encima de lo proyectado.
En tanto que los gastos reservados del mandatario se elevaron a $90 millones y los recursos destinados a publicidad oficial fueron de $849 millones (se había presupuestado $210 millones).
Tampoco fueron presentadas rendiciones de diferentes organismos gubernamentales.
Los argumentos utilizados por los senadores del FUJ no fueron diferentes a los esbozados por sus compañeros en Diputados en la sesión del 29 de julio.
Quienes intervinieron en el debate fueron Leyes (Belgrano), Camilli (Pringles) y Debandi (Chacabuco). Todos hicieron hincapié en el “contexto nacional” y la “herencia que dejó Mauricio Macri”.
Lo cierto es que la ejecución de los fondos estuvo marcada por los tiempos electorales. Claro ejemplo son los recursos que se canalizaron por el ministerio de Desarrollo Social, la secretaría General de la Gobernación y la Universidad de La Punta, entre otros, organismos.