La UNSL lanzará un censo estudiantil

El Censo Estudiantil comenzará el próximo 20 de septiembre, antes del inicio del segundo cuatrimestre. El objetivo de la Universidad es conocer la situación de sus estudiantes, el aprendizaje y desempeño desde la virtualidad y trabajar en políticas institucionales que garanticen más y mejor educación superior.

Con la información que suministre el censo, la Institución podrá contar con herramientas para consolidar este esfuerzo académico.

A través de la secretaría Académica, en colaboración con la secretaría de Asuntos Estudiantiles y Bienestar Universitario (Saebu) y la subsecretaría General, la Universidad Nacional de San Luis trabaja en un censo cuyos ejes posibiliten tener información de primera mano de los y las estudiantes, informó Noticias de la UNSL.

Se consultará sobre la forma en la que han podido enfrentar la situación de virtualidad del primer cuatrimestre, cómo les ha significado esta experiencia en cuanto a la capacidad de conectividad y la capacidad de llevar adelante las materias.

También se recabará información acerca de cómo han enfrentado las evaluaciones y la situación del trabajo en sus hogares, de forma tal que la Universidad pueda contar con información actualizada y generar ajustes y readecuarse para el segundo cuatrimestre.

El proyecto, según explicó el rector Víctor Moriñigo, tiene que ver con el salir a buscar el dato no solo de cuántos alumnos hay desde la virtualidad, sino en qué condiciones estudian, dónde están, qué estudian y cómo ha repercutido en ellos este año tan particular y extraordinario debido a la pandemia por Covid-19.

“La UNSL siempre ha tenido acceso a sus estudiantes mediante su rendimiento, su inscripción anual y su desempeño dentro de la Universidad y siempre la calidad de alumno/a universitario/a ha tenido sus bemoles, porque uno es o no es estudiante universitario en función de que su vida te va marcando otras prioridades o surgen otros episodios (…) Hoy al no tenerlos en los pasillos se hace necesario ir a buscar ese dato para saber el comportamiento de los y las estudiantes, para saber dónde están, qué necesitan, y sobre todo saber dónde geográficamente están para saber a dónde vamos llegando si se han regresado a sus orígenes, si han conseguido trabajo aquí, si van a seguir a pesar de todo lo que ha acontecido en este año”, señaló el rector.

En este sentido, el censo se transforma en una herramienta de gestión para mejorar y evaluar las posibilidades que los y las estudiantes están teniendo para la cursada en forma virtual.

“La UNSL jamás ha hecho un censo y ha generado una base de datos interesante de este tema. El objetivo es ese. Es obtener el dato, bajo una premisa de que no se puede administrar lo que no se mide, y considero que nosotros tenemos que administrar la relación con nuestros/as estudiantes y saber cuanti y cualitativamente dónde están y qué piensan”, añadió Víctor Moriñigo.

Con los resultados que arroje el censo, la UNSL podrá orientar sus políticas institucionales. El rector argumentó que estas políticas continuarán desarrollándose en la Universidad buscando soluciones a las índoles académicas y sociales, y contribuirán a la toma de decisiones.

“Hay que ver cuando tengamos el presupuesto 2021 qué políticas vamos a desarrollar y cuál vamos a priorizar. Por ejemplo: si vamos a priorizar la cuestión de conectividad porque los y las estudiantes están lejos, si vamos a priorizar la cuestión de becas, entre otras. Pero el objetivo de todo esto es que la universidad pueda llegar lo más pertinentemente posible”, agregó

La no presencialidad

Respecto al desarrollo académico virtual, el rector sostuvo que la UNSL ha reaccionado de manera rápida y ha podido dar alguna salida frente a esta situación extraordinaria que impuso la pandemia. Expresó que se trata de una situación de crisis a nivel mundial, nacional y local, sobretodo en la educación.

“Aquí la cuestión de fondo sería que el estudiantado pudiera volver al aula y tener una relación con sus docentes y vemos que esa situación en el corto plazo y mediano plazo no se va a dar. Así que la crisis va a continuar y lo que hay que tratar es de sostener y de varios caminos, elegir la no presencialidad”, dijo.

Moriñigo argumentó que la no presencialidad ha sido una opción única, no óptima, y que en el desarrollo del segundo cuatrimestre la UNSL continuará trabajando en sostener y capacitar a su comunidad frente a una «cuestión que ha llegado para quedarse» al menos en esta nueva normalidad hasta que aparezca la vacuna.

El censo: una herramienta de evaluación continua

La secretaria Académica Ana María Corti sostuvo que el censo contribuye a chequear información que desde principio de año cada una de las unidades académicas ha venido llevando a través de encuestas, entrevistas y observaciones de rendimiento en el primer cuatrimestre.

Sostuvo que en cada facultad se ha realizado un monitoreo permanente de lo desarrollado a lo largo del primer cuatrimestre y que arroja datos y una tendencia de cuál es el nivel de conectividad de los estudiantes y qué dificultades han enfrentado.

“El censo lo que tiene es la posibilidad de indagar en el propio estudiante y que sea el estudiantado quien nos informe sobre las dificultades no solo de la cursada en sí, sino que también hay un tópico que estamos incorporando que es el de `discapacidad`, es decir tener una idea cierta de cuántos alumnos/as con discapacidades tenemos y cuáles son los requerimientos que este segmento de estudiantes nos hacen respecto de las necesidades y adecuaciones que la UNSL debiera hacer para garantizar el derecho a la educación y la permanencia”, explicó Corti.

Por otra parte, la secretaria sostuvo que el censo tiene la ventaja de ser una herramienta de evaluación continua, que se iniciará antes del segundo cuatrimestre porque tiene la posibilidad de generar un rastreo que maximice los datos, incluso de aquellas poblaciones de estudiantes que por alguna razón particular debieran actualizar los datos que tienen incorporados en el sistema alumnos SIU Guaraní, sobre todo de domicilio y certificaciones de estudios.

“Para nosotros también estos datos son importantes porque sabemos que hay un grupo de estudiantes que se han trasladado a sus lugares de residencia con sus padres, y localizarlos en esta situación es un dato importante, porque nos permite dimensionar cuál es la cantidad de alumnos/as que tenemos en San Luis y cuántos hay fuera de la Provincia”, finalizó la funcionaria.