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Elsa Serrano murió por inhalación de humo por el incendio en su departamento

Lo determinó la autopsia. Según el estudio preliminar, el fuego empezó por un cortocircuito en un transformador.

Elsa Serrano falleció por inhalación de humo.
Actualizada: 17/09/2020 20:21
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La autopsia al cuerpo de Elsa Serrano determinó este jueves por la mañana que murió a causa de una asfixia por inhalación. Así lo confirmó el fiscal Sebastián Fedullo, a cargo de investigar el incendio que se desató el miércoles por la noche en el departamento de la reconocida diseñadora italiana, ubicado en la calle Maipú al 900, en Retiro. Los estudios preliminares indican que el fuego se habría originado por una falla eléctrica.

Familiares de Serrano reconocieron el cuerpo esta mañana en la Morgue Judicial. Según indicó el periodista Ignacio González Prieto, que accedió al informe de la autopsia, la diseñadora tenía quemaduras parciales en el cuerpo, las manos y la ropa y presentó el “signo de Montalti”: “Tenía depósito de aire en la vía aérea. Ella seguramente estaba descansando o en otra actividad, el departamento se llenó de humo y consumió el monóxido de carbono, que estaba presente en la sangre también”.

El departamento, ubicado en el tercer piso, quedó en gran parte quemado. Según informaron fuentes cercanas a la causa, no se encontraron hasta el momento indicios de que el incendio haya sido intencional. Después de trabajar toda la mañana en el lugar, el estudio preliminar de la Policía de la Ciudad apunta a que el fuego se originó por un accidente eléctrico, un cortocircuito en un transformador conectado a una lámpara en una ventana.

Restan determinar el lugar de inicio del incendio, qué zonas fueron afectadas, cómo se propagó y las marcas del fuego, qué materiales había en el lugar, entre otros. “En el laboratorio se va a ver la caracasa del transformador totalmente derretida, al igual que los cables. Lo que generalmente se produce es el efecto Shull, que es cuando la energía eléctrica tiene mucho peso, se carga el cable, genera energía calórica y eso desata el incendio”, agregó.

La calificación del expediente a cargo del fiscal Fedullo es “muerte en ocasión de estrago”. Según las estadísticas que maneja la Policía de la Ciudad, cuando ocurren episodios de estas características, la causa de la muerte es, en un 70% de los casos, por la inhalación de monóxido de carbono u otros gases tóxicos. Además, el 60% de los incendios de este tipo se generan por una falla eléctrica, publicó Todo Noticias.

Elsa Serrano.

El fuego empezó poco después de las 20 del miércoles. Los rescatistas entraron por el edificio lindero desde la terraza y bajaron hasta el tercer piso. Una vez allí, atacaron las llamas. Apenas trascendió la noticia, allegados de Serrano intentaron comunicarse con ella, pero la falta de respuesta alimentó la sospecha de que la persona que habían encontrado muerta pudiera ser ella. Finalmente, los familiares de la reconocida diseñadora reconocieron el cuerpo este jueves por la mañana.

Elsa Serrano, un ícono de los ’90

Elsa era italiana, pero se consagró en la Argentina. Fue el símbolo de la moda en los años 90, la diseñadora que vestía a las mujeres más famosas del país en esos años. Le hizo el vestido de novia estilo Scarlet O´Hara en “Lo que el viento se llevó” en tafeta de seda natural con encaje de Bruselas de color tiza con tres enaguas a Susana Giménez cuando se casó con Huberto Roviralta en el Roof Garden del Hotel Alvear. También le diseñó el vestido de novia a Claudia Maradona cuando le dijo “Sí quiero” al futbolista más amado de la Tierra. El modelo estaba bordado con 800 cristales de roca, 1500 piedras y 5 kilos de canutillos de cristal traídos desde Francia.

En el plano político, vistió a María Lorenza Barreneche, esposa del expresidente Raúl Alfonsín. Además, se encargó de la ropa de Zulemita Menem durante largos años, mientras la hija de Carlos Menem acompañaba al entonces mandatario en sus giras oficiales.

En el 2001, durante la crisis económica que atravesó el país, quebró y vio cómo le remataron el lugar en el que atendía personalmente a todas sus clientas. Después intentó reinventarse, tuvo un piso sobre la calle Callao, aunque nunca volvió a ser lo mismo. Hasta hace muy poco hacía trabajos a pedido.

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