San Luis Unido rechazó el presupuesto de Rodríguez Saá porque no tiene planes de generación de empleo y antipobreza
El Gobierno volvió a tener el respaldo de un puñado de legisladores aliados para avanzar en la media sanción del proyecto que fija el plan y las metas para el próximo año. La oposición cuestionó que carece de programas de generación y estímulo del trabajo.
Por Julián Pampillón
En una sesión maratónica semipresencial por la pandemia, este miércoles el Gobierno provincial logró la aprobación del Presupuesto 2021 en la Cámara de Diputados. La iniciativa está marcada por la ausencia de obras públicas significativas y los superpoderes que tendrá nuevamente el gobernador Alberto Rodríguez Saá.
Es que gracias al apoyo de diputados con los que viene contando desde hace tiempo, pudo llegar a los números necesarios. La votación culminó con 27 votos a favor, 11 en contra y cuatro abstenciones.
Al acompañamiento por parte del bloque oficialista del Frente Unidad Justicialista de Rodríguez Saá, se le sumaron los votos de Sanluiseños por el Cambio, Peronismo del Interior y de los diputados Alberto Fara, Bartolomé Abdala, Mónica Domínguez y Ricardo Chávez, nombres que una vez más reiteraron el apoyo.
Quienes rechazaron la llamada "ley de leyes" fue el interbloque de San Luis Unido que fundamentó los diferentes puntos débiles y contradictorios. Mientras, Todos Unidos decidió abstenerse con el objetivo de que el Gobierno cuente con la herramienta, aunque también hizo críticas al proyecto.
En síntesis, el proyecto fue aprobado tal cual fue enviado desde el Ejecutivo. Estima un gasto de $77.569.105.384 y el equilibrio entre el gasto corriente y el de capital no fue tenido en cuenta como se preveía (57,84% y 42,13%).
Diputado Gastón Hissa.
La encargada de defender el proyecto fue la presidenta de la Comisión de Finanzas y miembro del FUJ, María Eva Morel que justificó que fue realizado “en el marco de la incertidumbre” y la crisis desatada “por el Gobierno de (Mauricio) Macri”.
“Las consecuencias son muy negativas en lo social por la pandemia, Argentina y San Luis no va a ser la excepción”, sostuvo y aseguró que se trata de un Presupuesto “equilibrado y prudente”.
Dio algunos detalles como la baja de la coparticipación y la recaudación. También lo calificó de “austero” y que “expresa todo el plan de gobierno”.
Desde San Luis Unido Mónica Becerra (Avanzar) se detuvo a revisar los números. Lo hizo en su calidad de miembro informante por la minoría y centró las observaciones en los gastos previstos como en vivienda, educación, la falta de generación de políticas para mitigar la pobreza y la generación de trabajo.
“Este proyecto debería hacer mucho hincapié en pilares fundamentales como la creación de trabajos y a la educación para salir de la crisis económica que vive la sociedad y hacer un ataque a la pobreza”, manifestó.
De esta manera afirmó que no logran percibir “un acercamiento a sectores con situaciones críticas”. “Vemos inversiones superfluas como los $96 millones de gastos reservados, no atiende a las necesidades de los sanluiseños”, aseveró.
La sesión fue semipresencial.
También dio cuenta que los recursos “no alcanzan para cubrir todos los gastos” y que por esta razón “se hace uso de las reservas”.
El copresidente de SLU Gastón Hissa (Avanzar) se sumó a Becerra, aunque realizó un análisis más político. “El modelo de (Alberto) Rodríguez Saá ha fracasado, han resquebrajado el tejido social”, disparó.
“Los datos de la pobreza debería darle vergüenza al oficialismo. Indicadores recientes ubican a San Luis con 39,2%. Antes era Macri ahora es la pandemia. Ya estamos hablando que será deficitario el Presupuesto. Tienen que hacer autocrítica, el plan de lucha contra la pobreza fracasó, es objetivo”, agregó.
Señaló que no se observan políticas públicas y que “es poco serio llamar equilibrado al proyecto”.
“Existe un desfasaje de $5 mil millones, hay una demanda de viviendas que con lo destinado no se cubrirá, tres de cada cuatro pesos que tiene la provincia es de la Nación ¿dónde está la independencia económica que no la veo? El Gobierno busca defender lo indefendible”, profundizó.
A la hora de argumentar la postura del bloque, Juan Pablo Funes (TU) consideró que, debido al “complejo escenario” desatado por la pandemia, “era necesario que el Ejecutivo cuente con una herramienta”. Se mostró crítico.
También hizo hincapié en las cifras de la pobreza provincial y el desempleo: “¿Cuál es la estrategia para evitar o disminuir los números? no lo sé porque en el Presupuesto no se visualiza”.
“En San Luis no hay trabajo. Los que aspiran los puntanos es que el Gobierno vuelva a abrir el plan, no tenemos una matriz productiva. San Luis no produce, nadie tiene éxito si no se revierte. Si nadie trabaja no puede evolucionar”, dijo.
La sesión tuvo una duración de casi nueve horas.
Los diputados que también formaron parte del debate fueron Fara (en calidad de miembro informante por el segundo despacho en minoría), el copresidente de la bancada de San Luis Unido, Luis Lucero Guillet (UCR) y Víctor Sosa (UCR- SLU), Verónica Causi (Sanluiseños por el Cambio), Mario Merlo y Berta Arenas (JU), Sonia Delarco y Anabella Lucero (FUJ), Bartolomé Abdala, José María Escudero y Ariel Barrozo.
Lo cierto es que el Presupuesto para el año que viene se utilizará $3.209.809.311 perteneciente al fondo anticrisis. Por la incorporación de esos fondos el presupuesto es “deficitario”, observaron de la oposición.
Los recursos estarán divididos en erogaciones corrientes ($44.862.660.324), de capital ($32.681.445.060) y aplicaciones financieras ($25 millones). Desterrando así la idea de equilibrio financiero. .
Tiene previsto para vivienda, urbanismo y otros servicios $1.843.943.013, aunque no se aclara más información, como por ejemplo la cantidad de hogares a construir o en dónde lo harán. Son fondos nacionales.
También se destinarán $121.375.000 en el Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis y No Binaries. Otra vez, no hay más detalles.
Los recursos para publicidad oficial son de $534.297.908. La experiencia en años anteriores indica que en los últimos años lo presupuestado siempre fue superado.
El ministerio de Obras Públicas e Infraestructura contará con $11.577.731.750 pero leyendo entre líneas, no hay proyectos de relevancia, e incluso municipios que (o casualidad) son dirigidos por intendentes opositores (como El Trapiche, Merlo, Carolina, entre otros) no recibirán un solo peso.
Por otro lado, se buscó que tanto el artículo Nº 9 como el Nº 10 no sean aprobados. Concretamente se refieren a la autorización al Poder Ejecutivo para introducir “incrementos de erogaciones” y disponer las “reestructuraciones que considere necesarias”. Traducido, habilita a Rodríguez Saá a mover partidas sin límites.
Pero no obtuvo el apoyo y se descartó. La votación para que no sufra modificaciones resultó con 26 votos a favor, 14 en contra y cuatro abstenciones.
Finalmente, el proyecto obtuvo la media sanción y pasará a la Cámara de Senadores donde el oficialismo tiene mayoría absoluta por lo que será solo un trámite su aprobación.