Senadores y diputados terminan el año sin pagar una deuda más
Por Daniel Miranda
Quedan cuatro sesiones para cerrar el calendario parlamentario y no dan señales de que quieren derrumbar un muro que los separa de la sociedad.
Senadores y diputados se siguen negando a tomar medidas para facilitar el acceso al trabajo que hacen.
A esta altura de los tiempos no hay argumentos para postergar la transmisión de las sesiones.
Emitir en vivo y en directo las deliberaciones es un primer paso fundamental para encaminarse a un acercamiento a la ciudadanía.
Se trata de una decisión política que involucra al vicegobernador de la provincia, los ocho senadores y los 42 diputados que están en ejercicio. (Un senador está cumpliendo prisión preventiva y una banca en la Cámara Baja está sin cubrir por una impugnación)
Hay que dejar en claro que hay distintos grados de responsabilidad.
La llave para que las sesiones estén disponibles al público la tiene el partido político que reúne la mayoría en ambas cámaras. Es decir, el Frente Unidad Justicialista.
El Senado no da indicios.
La oposición (San Luis Unido) tomó impulso en las últimas semanas en la Cámara de Diputados y presentó un proyecto de resolución para que las deliberaciones sean televisadas en vivo y sin cortes.
El oficialismo bloqueó la aprobación de la iniciativa frente a los pedidos de tratamiento.
De acá al final del año parlamentario, el 30 de noviembre, queda otra norma crucial: la Ley Impositiva Anual. Resta entonces el debate sobre el aumento de impuestos que propondrá el gobernador.
¿Esta ley se tratará también a espaldas de la sociedad?
Es hora que el Poder Legislativo empiece a facilitar el acceso a información pública.
Aunque insuficiente será un avance porque la agenda de la transparencia es más amplia.
El proyecto fue presentado por el copresidente del interbloque San Luis Unido, Luis Lucero Guillet (UCR).