Más de 300 detenidos en nueva manifestación de la oposición en Bielorrusia
Los partidarios volvieron a salir a la calle el domingo en Minsk para manifestarse contra el presidente Alexander Lukashenko, en un contexto de ira creciente tras la muerte de un opositor que fue detenido por la policía.
La policía comenzó a dispersar la manifestación en la capital casi inmediatamente después del inicio a las 12H00 (09H00 GMT), utilizando granadas aturdidoras, cañones de agua y gas lacrimógeno, según los medios locales, que difundieron videos en los que se ve a hombres con pasamontañas echando a un grupo de personas en una avenida.
La organización bielorrusa de defensa de los derechos humanos Viasna dio cuenta de al menos 388 detenidos, incluido periodistas.
En las redes sociales, algunos usuarios mostraron fotos de enfrentamientos con la policía antidisturbios en algunos patios de edificios.
“Lukashenko usó gas, granadas y armas de fuego contra los manifestantes. Muchos heridos. Devastada”, reaccionó en Twitter la principal figura de la oposición, Svetlana Tijanóvskaya, exiliada en Lituania.
Antes de la protesta, unas 15 estaciones de metro fueron cerradas y el acceso a la red móvil era limitado, constató una periodista de la AFP.
La manifestación de este domingo se produce después de que el viernes miles de personas salieran a la calle en Minsk en homenaje a un opositor fallecido tras ser detenido por la policía, en un país sacudido por una ola de protestas inédita desde la controvertida reelección de Lukashenko el 9 de agosto.
Roman Bondarenko, de 31 años, fue arrestado tras un altercado entre habitantes e individuos que retiraban lazos rojos y blancos (los colores de la oposición) que estaban colgados en el patio de un edificio de la capital.
El hombre, que presentaba lesiones cerebrales, falleció al día siguiente en un hospital.
Tijanóvskaya había pedido rendir homenaje a un “hombre que murió porque quería vivir en un país libre”.
El presidente Lukashenko presentó el viernes sus condolencias y ordenó una investigación “honesta y objetiva” sobre las circunstancias de la muerte de Bondarenko.
Desde el inicio de las protestas, al menos cuatro personas han muerto en manifestaciones o tras ser detenidas, pero otras muertes sospechosas hacen temer un balance mayor.
Además miles de manifestantes han sido arrestados y decenas de ellos han denunciado torturas durante su detención.
Lukashenko, que cuenta con el apoyo de Rusia, rechaza abandonar el poder y sólo mencionó vagas reformas constituciones para intentar calmar la situación.