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Mientras sigue sin definirse el regreso presencial de las clases 2021 ¿Cómo deberían prepararse las escuelas?

Condiciones edilicias, más personal y medidas sanitarias junto al plan de vacunación docente figuran como puntos centrales en un protocolo que deberá establecer el Gobierno de San Luis. Los gremios piensan un retorno con modalidad mixta (virtual y presencial) que no amontone a todos los alumnos: “Ni todos juntos, ni todos los días”. Consideran que las condiciones "deben ser óptimas" y que la vacunación de docentes contra el coronavirus es un punto "vital".

Ya se piensa cómo podría ser el regreso a clases. Pero el Gobierno todavía no define protocolos.
Actualizada: 26/01/2021 16:37
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A menos de un mes para que se inaugure el nuevo calendario escolar, las expectativas crecen con los días. El interrogante está centrado si el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá establecerá el regreso a la presencialidad.

Después de un año con casi todas las escuelas cerradas, con los alumnos en sus casas y tomando clases de manera virtual, ¿cómo deberían acondicionarse las instituciones para recibirlos nuevamente?

Para conocer cómo es el panorama actual del sistema escolar público, El Chorrillero dialogó con tres sindicatos.

La Unión de Trabajadores de la Educación de la provincia (UTEP), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la Unión de Docentes Argentinos (UDA) San Luis, puntualizaron qué se debe considerar para la vuelta.

Coincidieron que las condiciones tienen que ser “óptimas para el retorno”, y apuntaron sobre todo en la salubridad, el personal necesario para que se encargue de ello y la correcta implementación de los protocolos.

Se mostraron de acuerdo con el regreso siempre y cuando “existan garantías” para resguardar la salud de la comunidad educativa.

La secretaria General de UTEP, Soledad Correa Amiotti subrayó que todo eso “llevaría tranquilidad” a los maestros y también a los padres.

Los sindicatos tendrán una reunión en febrero, en el ministerio de Educación del Gobierno provincial, para avanzar en un protocolo definitivo.

Allí tratarán el procedimiento, que se modificará teniendo en cuenta la nueva realidad epidemiológica.

“Se debe hacer foco en el ingreso y egreso de los chicos, que un grupo entre 15 minutos antes que el otro para que no se junten en la entrada, esa es una opción. Debe haber personal de maestranza para tomar la fiebre y otro que controle los baños. La asistencia también podría darse por día”, indicó Correa Amiotti.

También sostuvo que los recreos podrían ser asignados por turnos, y que la presencia de alcohol en gel y desinfectante “debe ser clave”.

Pero más allá de eso, hizo hincapié en la importancia de tener definido en corto tiempo la modalidad, como conocer si será mixto, que significa con presencialidad y virtualidad, y la cantidad de chicos que asistirán a lo largo de la semana.

Si bien se tiene previsto que el 22 de febrero retomen las actividades los administrativos, los docentes y el resto del personal, el 1 de marzo iniciarían concretamente las clases.

“Se tratará de volver no con la totalidad del tiempo, ni todos juntos, ni todos los días, se irá alternando de acuerdo a la capacidad y matrícula de cada establecimiento”, aseguró el secretario General de AMET, Borja Orozco.

La infraestructura educativa

La situación edilicia de los establecimientos es un párrafo aparte para las entidades sindicales. Si bien se sabe que el Gobierno comenzó las tareas de refacción y acondicionamiento, el Gobierno no les brindó información acerca de qué se está llevando a cabo, ni tampoco qué arreglos se hicieron en el 2020.

Borja Orozco señaló que las falencias más comunes con la que se topan son “filtraciones y humedad”, que derivan en otros problemas más graves.

“Desde hace mucho tiempo venimos insistiendo en que se capacite al personal no docente. En Villa Mercedes existe la UPRO y en capital el Centro de Formación Profesional Otto Krause donde pueden ser enviados para resolver mucho más rápido cualquier inconveniente que se presente”, aseveró.

El secretario General de la UDA, Jorge Lazarini tuvo en cuenta la ventilación de las aulas, un aspecto destacado a tratar: “En muchos lugares las persianas y ventanas no funcionan, por ello hay que hacer un relevamiento para saber qué institución está en condiciones y cuál no para poder habitarla para la presencialidad”.

“El Estado debe hacer una fuerte inversión en las escuelas, sea nacional  o provincial, la educación no se debe politizar, debe ser una política pública”, completó.

Bajo la misma temática Correa Amiotti dijo que, ante un caso sospechoso, “se debe contar de un espacio para aislar al alumno, docente o personal, comunicarse con Salud y hacer los controles necesario”, y añadió que, a la hora de comenzar con la asistencia, “tiene que existir lo básico, lo necesario como que los baños estén óptimos”.

El martes de la semana pasada, los gremios docentes fueron convocados a un encuentro con el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, que desarrolló actividades en la provincia. Uno de los temas abordados fue la vacunación para los docentes que se iniciará en febrero.

En el marco del regreso a las regreso a las aulas, la vacuna contra el coronavirus es un punto “de vital importancia” para los actores educativos.

“Hay que tomar conciencia. Cuando lleguemos a una escuela no vamos a tener el 100% de garantía de que no va a pasar nada. Nos aseguraron que se va a tratar de vacunar a todos los docentes del país antes del inicio del ciclo lectivo. Hay docentes que no quieren hacerlo por miedo o por determinada razón, depende de cada uno”, manifestó Borja Orozco.

Lo que dejó el 2020

La pandemia y el desafío educacional al que se enfrentó el sistema es quizás el tema más delicado, sobre todo ante la virtualidad, las nuevas formas de enseñanzas y el intento de llegar a todos los alumnos.

Una de las metas esenciales para Correa Amiotti es que los chicos que se desconectaron o descontinuaron con los estudios regresen: “Es el gran objetivo”.

“Hay un número importante de aquellos que participaron muy poco, más los que ni siquiera lo hicieron. Esperemos que el año exista el acompañamiento del Estado provincial para poner en las condiciones necesarias a los edificios y así garantizar que no se vaya nadie. Para ello vamos a necesitar nombramientos, más personal docente, auxiliares, entre otros”, advirtió.

Lazarini  resaltó que la responsabilidad de acercar las herramientas educativas "es del ministerio”.

“Debe salir en la búsqueda de todos aquellos que hayan abandonado el estudio en el 2020 debido a distintas circunstancias como la falta de interés o de elementos”, finalizó.

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