“Dar vuelta la ley del aborto es nuestro desafío”, marcharon por la vida en San Luis
Organizaciones, católicos, evangélicos y vecinos se movilizaron por el centro de la ciudad. Destacaron el fallo de la jueza Eugenia Bona que declaró la inconstitucionalidad de la IVE.
Como es habitual, la Plaza Independencia fue el punto elegido para la concentración que se realizó este sábado con el fin de marchar en defensa de la vida. Pasadas las 16 comenzaron a llegar los primeros participantes con banderas argentinas, pañuelos celestes, globos, carteles y bombos.
La manifestación se enmarcó en el Día del Niño por Nacer, que se conmemoró el jueves pasado. En ese contexto volvieron a expresar el rechazo a la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y anticiparon que buscarán revertir la norma, que fue aprobada en el país el 30 de diciembre pasado.
Niños, jóvenes y adultos recorrieron en silencio el centro puntano para enmarcar el malestar por la sanción de la ley del aborto. Lo hicieron hasta llegar a la Plaza Pringles, en donde se llevó adelante el acto central.
“No bajamos los brazos, seguimos pensando y luchando por lo mismo. Que se respete toda vida, desde la concepción hasta la muerte natural. Es el primer derecho que hay que cuidar”, sostuvo monseñor Gabriel Barba.
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En declaraciones a El Chorrillero transmitió su agrado ante el fallo de la jueza Laboral, María Eugenia Bona, que declaró la inconstitucionalidad de la IVE. Consideró que la magistrada tuvo un “firme argumento”.
“Realmente es un buen camino para que se pueda declarar que no es constitucional y se siga respetando la vida. Es una ley triste para los argentinos”, continuó el obispo que fue uno de los oradores de la jornada.
También mencionó que desde la Iglesia están acompañando a las mujeres “vulnerables” en los embarazos: “No solo en la decisión sino dándole lo necesario para un entorno más digno y que pueda decirle sí a la vida”.
“Detrás de una intención de aborto hay un fracaso primero. Por la experiencia que tengo de años, las mujeres que llegan a esta presión lo hacen porque está muy ligado a lo económico, un problema social”, explicó.
Los fieles católicos no fueron los únicos en participar de la marcha, además acudieron evangélicos, organizaciones provida y vecinos en general.
Ya en el corazón de la plaza principal, hablaron Barba, el pastor Walter Berlo y la abogada Victoria Robledo.
“Estas palabras de Jesús enmarcan y orientan nuestro sentir, accionar y compromiso que debemos tener siempre ante el cuidado de la vida, más allá de las imposiciones temporales, de las presiones externas que marcan las agendas de las naciones, de lo que se nos quiere hacer creer como políticamente correcto, progresista e iluminado”, expuso el obispo tras leer las palabras de Mateo 5:3-12.
Transmitió la ilusión de “un país que respete y sostenga la vida de cada persona. Porque cada vida tiene un valor supremo a respetar y es la base de todos los demás derechos”.
“Sueño con una sociedad que respete los derechos de todos y de cada uno. Con una Argentina que deje de profundizar grietas y en donde ya no haya colores que nos separen. Para ello, es necesaria la buena voluntad de construir juntos desde el respeto. Con una Argentina que sea ejemplo de tolerancia, de paz y de no violencia. Donde podamos manifestarnos, aún con disidencia, pero respetando por siempre los derechos de los demás”, afirmó.
Barba agradeció a los asistentes por “ser ejemplo de manifestación del libre pensamiento y sobre todo del apoyo por siempre a toda vida”.
“Me refiero al cuidado y dignidad de toda persona humana, en todas sus etapas y velando especialmente por aquellas personas más vulnerables. Todos, sin condición, deben ser respetados en su dignidad”, fundamentó.
En el tramo final del discurso destacó y dio su apoyo a la jueza Bona “por su valentía y por su lealtad al cumplimiento de sus funciones de preservar y velar por que se cumpla la ley”.
Coincidente con él se pronunció Berlo: “Este fallo nos trae una esperanza y sienta un precedente. Por esta razón no bajamos los brazos y vamos a seguir con esta lucha. Hasta que la Justicia sea realmente justa”.
El pastor evangélico hizo alusión a la conmemoración del niño por nacer y expresó “un dolor profundo” porque se haya legalizado “el derramamiento de sangre inocente”.
“Se requiere de una Justicia que engrandezca una Nación, que honre a la vida”, insistió, y cerró en medio de la adhesión de los presentes: “Viva la vida, viva San Luis, viva Argentina, viva la Patria”.
Por su lado, la abogada Robledo habló de la vida del niño por nacer como “una verdad objetiva e indiscutible”.
“Es nuestro deber defenderla, es una lucha que recién comienza, nadie se rinde”, expuso.
Tuvo en cuenta a las mujeres que no pueden tener hijos, y la obligación que tienen obras sociales de cumplir la ley, mientras no hay acceso a otros tratamientos.
“Nos estamos olvidando que a nosotros no nos corresponde decir quién nace y quién no. Es una competencia de Dios. Seremos invencibles aun cuando parezca que hemos perdido”, sentenció.
La actividad culminó después de las 18 en medio de aplausos y bombos, tras la entonación del Himno Nacional Argentino.