Recolectores exigieron a Tamayo elementos de seguridad y rechazaron el aumento en cuotas
Aseguraron que no cuentan con barbijos, guantes, ni alcohol en gel. A su vez, advirtieron con un cese total de las actividades si no llegan a obtener una respuesta óptima de parte del municipio.
En la tarde de este miércoles, los trabajadores municipales encargados de la recolección de la basura de la ciudad comenzaron con una medida de fuerza, y realizaron una asamblea en conjunto con la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) para pedirle a la gestión de Sergio Tamayo elementos de protección para preservar sus salud ante la segunda ola de coronavirus; y también el incremento salarial adeudado del 2020.
En el inicio de la semana el intendente anunció un 15% más de actualización salarial que se suma al 35% comunicado antes. El aumento de este se desembolsará en cinco tramos.
Durante el 2020 los municipales recibieron un bono extraordinario en los meses de octubre ($3000), noviembre ($4000) y diciembre ($5000), y no hubo incremento de sueldo.
“Decidimos no hacer paro de manera inmediata pero sí continuaremos con las asambleas hasta que obtengamos una respuesta, que podría darse este viernes”, explicó un empleado que prefirió resguardar su identidad, en una comunicación con El Chorrillero.
Los trabajadores rechazan el pago en cuota porque recién a fin de año se “verá reflejado en la totalidad en el bolsillo y la inflación se está comiendo día a día el salario”.
En este marco, manifestó que “la idea es poder solucionar todo a través del diálogo”.
El trabajador denunció que la Municipalidad no provee alcohol en gel, ni barbijos, ni guantes: “Tenemos que llevar nuestros propios elementos”.
“Consideramos que hay una falta importante de preocupación por nosotros y no tienen en cuenta que desde que comenzó la pandemia nunca dejamos de trabajar y somos uno de los sectores más expuestos”, concluyó.
El servicio de recolección de residuos continuará funcionando normalmente hasta el viernes, día que esperan un pronunciamiento oficial.