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Canelo le ganó a Saunders por KO técnico

El mexicano ganó por nocaut técnico tras el octavo round, luego de que el rincón del británico decidiera parar la pelea debido a que Saunders recibió un duro golpe en el ojo derecho.

Canelo Alvarez castiga a Billy Joe Saunders: el mexicano fracturó el hueso orbital de su rival, que tuvo que ser internado.
Actualizada: 09/05/2021 10:01
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Cumplió con su palabra y reafirmó condiciones. Se burló de los que lo acusan de ser portador de un éxito grande conseguido en peleas chicas. Silenció los murmullos y salvó el negocio. Con la solvencia de un gran campeón y los recursos que suele dar la experiencia, el mexicano Saúl Canelo Álvarez derrotó por KOT en el 8° round al británico Billy Joe Saunders y revalidó su condición de mejor boxeador libra por libra de la actualidad al convertirse en campeón mundial unificado de la categoría supermediano versión AMB, CMB y OMB, en el AT&T Stadium de Arlington, en Texas.

El combate frente a Billy Joe Saunders fue un riesgo más que necesario que tomó Canelo para alimentar su credibilidad boxística y despejar las críticas de su último enfrentamiento con el turco Avni Yildirim, a quien venció en solo tres rounds, el pasado 27 de febrero, en Miami. Si bien los especialistas hubiesen preferido que este duelo se haga un par de años antes, el británico estuvo a la altura de las exigencias deportivas del mexicano y las expectativas de los 73.000 espectadores que colmaron el AT&T, batiendo la marca histórica de 63.352 espectadores en estadio cerrado que lograron Muhammad Ali- León Spinks, en 1978.

En un match cambiante y de alto vuelo emocional, Saunders exhibió un manejo de piernas admirable, un buen directo de izquierda y pasajes ofensivos certeros que complicaron por momentos al Canelo. Sobre todo, en el 5° y 7° rounds, cuando se dio el gusto de provocarlo, mostrándole la lengua e invitándolo a llevarlo contra las cuerdas. Pero careció de continuidad y resolución para cortar la dinámica que le imprimió el mexicano, que con sus repetidas combinaciones a la cabeza y al cuerpo cumplió con su palabra de terminar con el invicto del británico, que ahora quedó con un récord de 30 triunfos y una derrota.

Saul "Canelo" Alvarez, con su triunfo sobre Billy Joe Saunders, unificó tres coronas de la categoría supermediano.

Canelo manejó los tiempos, los golpes y la excitación de los 73.000 espectadores que colmaron el estadio de los Dallas Cowboys en plena pandemia del coronavirus. Si bien dejó ir el primer round, estudiando al británico, rápidamente tomó el control del ring y obligó a Saunders a dar un paso para atrás. En el octavo lo liquidó a pura potencia con un ascendente de derecha que dio de lleno en el ojo derecho del europeo que no le permitió salir a combatir en el noveno.

“No podía ver, hablé con Mark Tibbs (N. de la R.: el entrenador de Sunders) y dijo que no podía ver, no lo dejó salir”, señaló el promotor Eddie Hern. “Creo que Billy peleó muy bien, pero Canelo es bastante fuerte, rompió su cuenca del ojo. Fue muy bueno, muy bueno. Sin embargo, fue una buena pelea de Billy Joe Saunders, vino a ganar”. No necesitaron hacer estudios en el rincón, sabían que el hueso orbital estaba fracturado. Ante la gravedad de la lesión, el combate fue detenido y el boxeador internado de inmediato.

Al momento del desenlace, los tres jurados tenían al boxeador Tapatío arriba en sus tarjetas: dos 78-74 y el otro 77-75. Esta última coincidió con la de LA NACION, que vio ganar a Saunders las vueltas uno, cinco y siete; el resto se las llevó Álvarez.

La grave lesión de Billy Joe Saunders, que tuvo que ser hospitalizado tras el golpe de Canelo Álvarez.

Todo el bagaje boxístico del Canelo estuvo respaldado por una impecable condición física y una muy buena estrategia diseñada por su técnico, Eddy Reynoso. A lo largo de los ocho rounds que duró la pelea, nunca se desesperó por descargar la bronca acumulada en el destrato previo de Saunders. Ni se descuidó defensivamente cada vez que fue al palo por palo con Saunders. Virtud fundamental con la que comenzó a quebrar, poco a poco, la resistencia de los aficionados mexicanos, que asociaban su condición de cuádruple campeón mundial -superwelter, mediano, supermediano y semipesado- al apoyo marketinero de las grandes cadenas televisivas.

Contra los prejuicios, a los 30 años, Saul Canelo Álvarez acentúa su crecimiento boxístico pelea a pelea sin medir riesgos. Porque, a pesar de la constante fluctuación de peso (en los últimos cuatro combates peleó entre 160 y 175 libras), mantiene intacta su precisión y potencia en los golpes que lanza. Algo que contra Saunders volvió a dejarlo claro. “Sentí que le quebré el ojo, cuando llegué a la esquina le dije a Eddy que no iba a salir”, apuntó el campeón. Tenía razón. Saunders, dolorido, se bajó del ring al finalizar el combate y fue llevado directamente al hospital. No por nada, con 36,8 por ciento, es el segundo púgil más efectivo de la actualidad, detrás de su compatriota Miguel Berchelt.

Saul "Canelo" Álvarez venció a Billy Joe Saunders por demolición.

A los 30 años y un récord de 56 (38 por KO), una derrota y dos empates, Saúl “Canelo” Álvarez sabe más que nunca que debe después de este triunfo debe redoblar la apuesta. Por eso, ya se entusiasmó con hacer un duelo unificatorio antes de fin de año con el campeón mundial supermediano de la FIB, el norteamericano Caleb Plant: “Ojalá que se pueda dar la meta de unificar a corto plazo, quiero tener los cuatro cinturones”, expresó Canelo, minutos después de haber sumado a sus cetros de campeón AMB y CMB, el cinto de la OMB.

Sin dudas, este triunfo de Saúl Álvarez supone algo más que su reafirmación como mejor boxeador libra por libra de la actualidad. En un momento en que el boxeo marcha hacia inventos comerciales pocos beneficiarios para el espíritu deportivo de la disciplina, la creciente figura del Canelo le aporta un atractivo revitalizante para los que todavía piensan en jerarquizar el producto y salvar su credibilidad. Después de todo, el sábado, en Texas, ganó el Canelo, los aficionados, la industria y, principalmente, el boxeo.

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