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SAN LUIS

“La responsabilidad de lo que está ocurriendo es del Estado provincial. La sociedad no tiene la culpa”

La secretaria General de APTS, Ana Lía Trifirió reiteró su preocupación por el escenario del sistema sanitario. Desde salas de internación completas hasta hospitales de días sin lugar: el reflejo de la actual situación sanitaria en San Luis.

Coronavirus en San Luis.

por Julian Pampillón

elchorrillero.com

Actualizada: 12/05/2021 13:53

La cantidad de pacientes críticos subieron de manera exponencial en las últimas semanas hasta llegar a los 75, cifra histórica para la provincia desde que comenzó la pandemia. Qué dicen desde el sector ante este comprometido estado de la salud.

Semana a semana el escenario epidemiológico de San Luis mutó de “estable” a crítico a tal punto de que hoy el sistema de salud provincial cuenta con el número máximo de internados en terapia intensiva.

El avance de la segunda ola de coronavirus se acentuó a finales de marzo y comienzos de abril. Antes de la aceleración de casos, los contagios ocasionalmente superaban la franja de los 100 diarios. Hoy el promedio es más de 500.

La preocupación es atravesada por el desborde de las atenciones del sistema de salud puntano y la posterior respuesta. Es que, en la actualidad, los principales hospitales deben derivar los pacientes a centros más pequeños porque no hay lugar en las salas de internación.

Pero, por la reducida capacidad que tienen estos últimos, sólo tomó unos días para verse desbordados también.

Para observar el crecimiento de las personas que deben ser asistidas de manera crítica es necesario hacer un repaso de las cifras que informó hasta este martes el Comité de Crisis.

El 1° de abril el sistema sanitario contaba con 12 internados. El domingo 23, jornada récord de casos con 1156, se registraron 44 pacientes en las UTI, hasta llegar a los 75.

Si se traza una comparación entre el primero y el último número, en 41 días los internados subieron en un 525%.

Ahora quedan en evidencia las limitaciones del sanitario que no fue preparado por el Gobierno para un momento crítico como el que se vive.

A las frías estadísticas que reflejan el crecimiento, se le suma la voz de representantes del sector que desde hace tiempo subrayan el colapso. Una de ellas es la secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud (APTS), Ana Lía Trifiró que hizo un crudo balance de la situación en declaraciones a El Chorrillero.

“Desde hace una semana aproximadamente el sistema de salud está colapsado.  Estamos trabajando con las camas de terapias ocupadas en su totalidad, con las de terapia respiratoria llenas, con las de terapia intermedia llenas y la de pacientes moderados llenas”, puntualizó.

Ante este panorama deben utilizar el sistema de “camas calientes”, esto quiere decir que, apenas una de las camas se desocupa sea por muerte o porque el paciente recibió el alta médica, es ocupada por otra persona que la está esperando.

Otra de las consecuencias es que los enfermos deben ser trasladados de un lugar a otro hasta conseguir espacio para internarlos. Traducido, se deambula por salud. “Van y vienen con las ambulancias con un tubo de oxígeno”, señaló Trifiró.

Las complicaciones son inmediatas porque los hospitales de atención primaria o de Día cuentan con una reducida capacidad de respuesta tanto a nivel de infraestructura como de recursos humanos. En los edificios pueden albergar hasta cuatro pacientes y los cuidados deben hacerlos médicos generalistas y no especialistas.

“Esto es de suma tensión ya que estos profesionales se deben dedicar a la prevención de las enfermedades, al cuidado en el terreno y a otras cosas, pero no a este tipo de atención. Hacen una mala medicina porque no le corresponde estar atendiendo pacientes Covid ellos fueron preparados para otras situaciones”, agregó.

De esa forma quedó expuesta la falta de recursos humanos.

“Uno a veces entiende algunas cosas, pero estas no se entienden. Nosotros no estamos hablando de más dinero, ni aumentos de sueldo, ni nada que signifique gastos para el Gobierno, sino que se nos escuche y que sepan que todavía, si nos escuchan y nos unimos con la gente de la parte privada, podemos dar solución al colapso. Pero hay que decir que la responsabilidad es del Estado por todo lo que está ocurriendo, vemos que se señala mucho a la sociedad, pero no tiene la culpa de los contagios porque eso puede ocurrir, no hay que señalar”

El 23 de abril habló el gobernador Alberto Rodríguez Saá y sostuvo que solo había “tensión en nuestro sistema de salud” y que no estaba “estresado o a punto de colapsar”.

“No vamos a tomar medidas restrictivas, cada uno sabe lo que tenemos que hacer”, dijo.

Día a día la situación se vio agravada y en la actualidad funcionarios como la referente de Covid-19, Graciela Sarmiento y el director del Hospital San Luis, José Núñez se encargan de alertar sobre la grave situación.

La realidad es que el Gobierno inauguró el edificio del Hospital Ramón Carrillo de $10 mil millones y ahora por la gravedad busca la forma abrir las puertas para atender pacientes contagiados de Covid. Según la promesa del mandatario provincial podrían estar habilitado a comienzos de junio.

El escenario en la parte privada es idéntico con clínicas y sanatorios repletos o casi en su totalidad. Desde un principio, la administración de Rodríguez Saá quiso acaparar la atención para pacientes con coronavirus pero lo cierto es que éstas nunca dejaron de atenderlos.

A todo esto, se presenta otra suba: la de los muertos cada 24 horas. Este martes San Luis superó su propio récord al registrarse 13 decesos. En los primeros 11 días de mayo fallecieron 101 puntanos y se llegó a las 607 víctimas fatales desde el inicio de la pandemia.

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