INSEGURIDAD
Robaron $300 mil del auto de un martillero público en San Luis
El hecho ocurrió en la playa de estacionamiento de un supermercado de la capital. El damnificado, que es dueño de una inmobiliaria, cree que usaron algún inhibidor de alarma.
El viernes por la tarde los ladrones se hicieron de un gran botín, en una zona de mucha concurrencia, y a pocas cuadras del centro de la ciudad. La denuncia por el hecho fue radicada en la Comisaría 2°.
El dueño de una inmobiliaria de la capital llegó al supermercado ubicado en Sucre y Caídos en Malvinas, a las 17:30, y estacionó su auto en diagonal a la puerta principal. Solo algunos minutos bastaron para que los intrusos se llevaran una mochila con dinero.
“La situación generó amargura y mucha preocupación, porque adentro estaban todos mis datos, el de los clientes (dueños de los inmuebles) y de los inquilinos. Las direcciones de todos ellos y de la inmobiliaria”, dijo en declaraciones a El Chorrillero, el martillero público que pidió mantener en reserva su identidad.
Explicó que cuando estaba pagando tuvo que salir hasta el auto para buscar dinero, porque le faltaba. Después se retiró y se dirigió hasta las oficinas de la inmobiliaria. Fue allí cuando descubrió que le habían robado.
“Esto fue ocasional, porque los dueños de las propiedades no habían pasado a retirar antes el dinero debido a las restricciones por la pandemia. Estaba por entregarlo, por eso lo tenía en el auto. Nunca tengo ese dinero encima”, indicó.
Del baúl de su vehículo, un Peugeot 208, los delincuentes lograron sustraer una mochila táctica militar, que en su interior tenía una caja fuerte. “Había unos $300 mil que correspondía al pago de alquileres de tres propiedades, dos complejos y una casa; con todos los recibos. También otro dinero que era mío”, indicó el damnificado.
Cree que usaron un inhibidor de alarmas: “No hay otra forma. Atrás no tiene cerradura, es de cierre centralizado. Además nada había sido forzado”.
“Me confié, pensé que nunca me iban a robar del auto, que es nuevo, de este modo. Que estamos en San Luis, que todo es tranquilo, pero es hasta que te pasa, y ahora te queda el miedo porque encima tienen todos los datos”, se lamentó.
También contó que cuando se dio cuenta que no tenía sus pertenencias regresó al supermercado: “Hablé con las personas que estaban ahí y nadie había visto nada. Había muchísima gente a esa hora comprando. Cuando pregunté por las cámaras de seguridad de la playa, una persona de vigilancia me dijo que no funcionaban, y eso me dolió. No me explicaron más nada”.
“Me gustaría que la gente sepa que esto está pasando, que tome recaudos y que no vuelva a ocurrir”, dijo al final.
El hombre terminó radicando la denuncia en la Comisaría 2°, donde se iniciará la investigación.