Conflicto con los trabajadores de la alimentación: hubo una conciliación por 15 días y sigue abierta la negociación

“Que no haya aumento perjudica el bolsillo de los empleados y de manera considerable por la inflación”, comentó en declaraciones a El Chorrillero Marcelo Miloni, secretario gremial del Sindicato de Trabajadores de la Alimentación (STIA) en San Luis.

La semana pasada hubo una reunión entre la Federación de Trabajadores de la Industria de la Alimentación y la Cámara de la Industria de la Alimentación. Se pasó a un cuarto intermedio para el viernes y al no recibir respuestas, se decidió convocar a una medida de fuerza.

Este martes, y tras concretarse en todo el país medidas de fuerza, intervino el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación. Tras ello se dictaminó una conciliación obligatoria por el término de 15 días.

Este lunes se bloquearon los accesos y egresos a diferentes plantas, entre ellas las de Mondeléz, Arcor San Luis, Arcor Villa Mercedes y Bagley. “El motivo era acelerar las negociaciones”, detalló el sindicalista.

La paritaria de los trabajadores de la alimentación comienza el 1 de mayo de cada año y finaliza el 30 de abril del siguiente. En la última, la del 2020, consiguieron un aumento del 41%.

“Lo que la Cámara está prometiendo este año, es la pauta oficial que es un 29%. Nos ofrecen un 15% fraccionado (en cuotas) hasta diciembre y el resto a partir de enero en adelante”, indicó.

Lo que la Federación está pidiendo “ronda el 40% más la cláusula de revisión”, y que se pague lo más corto posible.

Las negociaciones están abiertas. En caso de no llegar a un convenio y conciliación, se evaluará tomar nuevas medidas de fuerza, según anticiparon.

“Parte de lo que se negocia en estas paritarias, además de acompañar el incremento inflacionario, es recuperar poder adquisitivo”, concluyó Miloni.