“Tres meses sin Justicia”; no hay avances en la causa por el crimen de Alejandro Ochoa

Este fin de semana se cumplieron tres meses del asesinato de Alejandro Ochoa en la localidad de Cortaderas, y poco se sabe de cómo avanza la Justicia en la investigación.

La familia sabe por la autopsia que a “Bebo” le quitaron la vida el 27 de marzo, o sea el mismo día que lo secuestraron en la casa rural donde vivía. El cuerpo apareció con signos de tortura seis días después, y en un avanzado estado de descomposición. Desde ese momento todo es un misterio que mantiene con incertidumbre a los parientes de Ochoa.

“No sabemos nada de la causa. Queremos que se sepa que ya hace 3 meses que a mi hermano lo mataron y no se ha hecho justicia”, contó Ivana Ochoa en el inicio de esta semana.

El abogado que representa a la familia, Iván Coria, le confirmó a El Chorrillero que en lo más reciente se solicitó la ampliación de declaraciones testimoniales en sede judicial de familiares, amigos, allegados y "cualquier persona que pueda brindar algún indicio sobre los responsables".

Coria dijo que también pidió que se libre oficio a la Municipalidad de Cortaderas para que entregue la nómina de los vecinos del terreno donde apareció muerto Ochoa, para "determinar los movimientos” que hubo “en los días previos al hallazgo”.

Se requirieron los datos del responsable de la obra en construcción, que estaba en inmediaciones a ese mismo lugar, para determinar si alguien vio algo.

“Tengo otras medidas, pero atento a la investigación, no puedo mencionarlas”, indicó Coria.

La jueza Penal Patricia Besso, que lleva adelante el caso, semanas atrás estuvo de licencia, y en ese periodo fue subrogada por Jorge Pinto.

“Tenemos varias sospechas, y se está trabajando. Es una investigación muy compleja y el objetivo es llegar a los responsables”, sostuvo el abogado que patrocina a la familia junto a Leonardo González.