Los diputados rodriguezaístas votaron una ley kirchnerista que afecta a San Luis
El proyecto impulsado por el bloque de Máximo Kirchner reduce el uso de biodiésel en el gasoil. Afecta a las elaboradoras de bioetanol de maíz. Impacta de lleno a San Luis ya que cuenta con dos plantas.
Tras un extenso debate, el proyecto que establece una nueva ley de biocombustibles obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados de la Nación y los legisladores puntanos rodriguezaístas acompañaron con su voto el proyecto que reconoce como ideólogo al jefe de la bancada oficialista, Máximo Kirchner.
El conteo final mostró un resultado final con 135 votos positivos, 110 negativos y dos abstenciones, lo que habilitó el giro a la Cámara de Senadores. Carlos Ponce, Karim Alume y Victoria Rosso dieron, una vez más, el visto bueno a favor de una iniciativa del kirchnerismo.
Se considera que el proyecto implica un retroceso en el régimen que viene regulando la producción de biodiesel y bioetanol. Implicará asfixia para esta industria y menos empleo en las provincias.
El proyecto aprobado contempla para el gasoil un corte mínimo de biodiésel de soja del 5% (en la actualidad es el 10%), aunque la secretaría de Energía podrá subirlo o bajarlo hasta el 3%. Las naftas deberán mezclarse con un mínimo obligatorio de 12% de bioetanol, pero podría bajarse a 9% con una reducción que afectaría el etanol de maíz, no el de caña de azúcar.
En San Luis, la empresa Diaser produce biodiesel desde el año 2010 y bioetanol desde 2014 de maíz. En 2020 atravesó serios problemas a raíz de no se autorizaba la actualización de los precios de los combustibles renovables y al fuerte aumento de los costos. Llegó a interrumpir la producción y suspender el personal.
En el establecimiento de biodiesel, con una capacidad de 7.200 toneladas mensuales, trabajan 60 personas, y en la planta de bioetanol, con una capacidad de 8.200 metros cúbicos mensuales, ocupan a 100 trabajadores. Sumados los empleos indirectos, la producción de ambos biocombustibles dan trabajo a alrededor de 300 personas, según datos que se conocieron a fines del año pasado.
En la discusión se planteó que se trata de “un traje a medida de algunos pocos amigos empresarios del kirchnerismo”.
Otro punto cuestionado es el que habilita a la secretaría de Energía a "elevar el referido porcentaje obligatorio cuando lo considere conveniente en función del abastecimiento de la demanda, la balanza comercial, la promoción de inversiones en economías regionales y/o razones ambientales o técnicas".
Así el corte podrá reducirse hasta el 3% "cuando el incremento en los precios de los insumos básicos para la elaboración del biodiésel pudiera distorsionar el precio del combustible fósil en el surtidor”.
Lo cierto es que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030 y tendrá su impacto en la producción en las dos plantas radicas en Villa Mercedes y San Luis, ambas compañías nucleadas en la Cámara de Empresas Pyme Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb).
Ahora, el proyecto que surgió de la mano de Máximo Kirchner, se trataría en los próximos 60 días en la Cámara Alta: el tiempo de una nueva prórroga que se estableció para el régimen actual.
En el país hay alrededor de 40 empresas productoras localizadas en 10 provincias que ocupan a más de 32.500 trabajadores de manera directa e indirecta.
Hay plantas de biodiésel en San Luis, La Pampa, Buenos Aires, Santa Fe, Santiago del Estero y Entre Ríos, y de bioetanol en San Luis, Jujuy, Córdoba, Santa Fe Salta y Tucumán.
“Votan en contra de los intereses de todos los sanluiseños”
Este domingo las entidades rurales de San Luis en un carta abierta al gobernador Alberto Rodríguez Saá y a los legisladores dedicaron un párrafo al proyecto votado por Ponce, Rosso y Alume porque “provoca un enorme perjuicio a la provincia en beneficio de otras”.
El documento fue emitido por la Sociedad Rural Río Quinto, Sociedad Rural de San Luis, Asociación Agrícola Ganadera Justo Daract, Sociedad Rural del Norte, Sociedad Rural del Rosario y Sociedad Rural Valle del Conlara.
“San Luis ha sido pionera en el respeto por el medio ambiente, estimulando la radicación de importantes emprendimientos de producción de biodiesel y etanol. Nos sorprende y nos duele que legisladores de San Luis aprueben con su voto la disminución en el corte de estos biocombustibles beneficiando a Provincias extractoras de combustibles fósiles que no le generan ningún beneficio a los puntanos ni al medio ambiente”, señalaron
Y a continuación sostuvieron: “Resulta muy duro aceptar que nuestros legisladores, representantes del pueblo de San Luis, no hayan emitido una sola palabra sobre el cierre de exportaciones; sino que además votan en contra de los intereses de todos los Sanluiseños en relación a la producción de biocombustibles”