En San Luis hay 20 mil personas de más de 60 años que aguardan la segunda dosis

El actual escenario de la campaña de vacunación en Argentina y en San Luis es, como mínimo, complejo debido a la falta de segundas dosis y la aplicación a cuenta gotas.

Por estas horas, llegar a una solución a las múltiples trabas y falta de gestión resulta indispensable en momentos que el avance de nuevas cepas más peligrosas y contagiosas, tal como la Delta, es una realidad.

Para afrontar esta delicada etapa, es vital inocular con ambas dosis a los grupos de riesgo, según advierten los expertos. En el caso de San Luis hay 20.286 personas de más de 60 años que aguardan completar el esquema, de acuerdo al informe mensual de la dirección provincial Estadística y Censos.

Unas 67.391 lograron comenzar el proceso con el primer componente y 47.105 lo terminaron.

A nivel nacional, mientras el Gobierno espera resolver las retrasadas cargas de inmunizantes, hay alrededor de 6.600.000 argentinos que todavía no recibieron la segunda inyección rusa.

Durante la semana, la ministra de Salud nacional, Carla Vizzotti celebró que más del 50% de los 45 millones de habitantes se aplicaron una dosis de las vacunas.

Pero más allá de eso, de los 23.714.686 inoculados, solo 6.008.542 (25,34%) completaron el esquema. Esta disparidad en el ritmo está ligada con la demora en la entrega de la segunda dosis de Sputnik V.

Si se toman los datos locales, hasta este domingo fueron inmunizados 290.065 puntanos pero 95.133 (32,8%) lo hizo con la inyección complementaria, según da cuenta el Monitor Público de Vacunas de la Nación.

Cuando se desglosan las franjas etarias de los grupos objetivos, se observan en detalle cómo se aplicaron en la provincia:

-De 60 a 69 años- 1ra dosis 35.911- 2da 22.309

-De 70 a 79- 1ra 22.396- 2da 17.663.

-De 80 a 89- 1ra 7.822- 2da 6.149.

-De 90 a 99- 1ra 1.233- 2da 970.

-De más de 100- 1ra 29- 2da 14.

Respecto a aquellos que fueron inmunizados con la vacuna del Instituto Gamaleya, 99.586 sanluiseños iniciaron el proceso y 29.348 lo completaron. No se aclara cuántos sobrepasan los tres meses de plazo recomendado.

¿Por qué se debe alcanzar lo antes posible a los grupos de riesgo?

Con la aparición de diferentes variables, vacunar a la mayor cantidad posible resulta de vital importancia.

De acuerdo a diferentes estudios por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cepa Delta implica un mayor contagio y podría generar una tercera ola de casos durante el invierno.

Hasta la fecha ya son 46 casos en Argentina de los cuales, 45 pertenecen a personas que provienen de un viaje al exterior. Lo cierto es que el reloj corre.

El epidemiólogo y asesor de la administración de Alberto Fernández,  Eduardo López, calificó como “desafortunado” y lamentable” la demora de la llegada de la segunda dosis de la vacuna Sputnik V.

“No me convence que el instituto Gamaleya cumpla a medida que puedan. Argentina está cercana a tener circulación con la variante Delta”, alertó.

Para graficar el momento y la necesidad de acelerar la llegada de más segundas dosis, es necesario observar cómo impactó la pandemia en los más grandes.

En los últimos 31 días se registraron más de 16 mil fallecidos a nivel nacional de los cuales casi 11 mil corresponden a más de 60 años, es decir un 68%. Estas cifras contrastan con el promedio de los fallecidos desde el inicio de la pandemia: 80%.

Del total de las últimas semanas más de 4400 muertes pertenecen al grupo de 40 a 59 años, o un 27,5%; casi 700 o un 4,3% de 20 a 39 años; y 32 menores de 20 años, un 0,2%.

Una de las características que tienen las personas adultas mayores es la de desarrollar condiciones de salud relacionadas con la edad, por ejemplo, diabetes, hipertensión, la enfermedad pulmonar crónica, entre otras. Todas agravan el cuadro si se diagnostica coronavirus.

Es por todo ello que, para López, “necesitamos proteger a los adultos mayores que más se mueren”: “Hay un montón que no tienen segundas dosis. Nadie sabe cuántos anticuerpos perduran con una dosis”.