Una investigación sin resultados y una familia que lucha para que se siga buscando y no quede en el olvido

Este sábado 14 de agosto se cumplirán 2 meses de la desaparición de Guadalupe Belén Lucero y habrá una movilización nacional. La familia le insistirá al Gobierno provincial para que continúe con la difusión de la búsqueda en las publicidades de Youtube y páginas oficiales, y además que intensifiquen los controles en puestos limítrofes.

Agosto comenzó con la misma angustia. A San Luis le sigue faltando una niña de 5 años. La única sospecha es que alguien se la llevó cuando jugaba en la puerta de una casa, en el Barrio 544 Viviendas. En la tarde del 14 de junio a Guadalupe le perdieron el rastro y quedaron un sinfín de interrogantes, en medio del frío, de la noche y la nieve. Es la protagonista de un hecho inédito para San Luis. Nunca antes una nena de su edad desapareció tanto tiempo.

Muchas pistas se descartaron en el camino y de la instrucción todavía está a cargo la Policía. Hasta el martes, según los datos oficiales, se habían concretado 400 allanamientos y 1.200 sectores en la provincia ya fueron rastrillados. La búsqueda pasó por 16 espejos de agua y todavía no termina. Dique Chico, Cruz de Piedra, Potrero de los Funes, La Florida, Berta Vidal de Battini, Nogolí, Paso de las Carretas, La Palmeras (San Francisco del Monte de Oro), La Estrechura, Saladillo, Vulpiani, San Felipe, La Huertita, Boca del Río, Piscu Yaco (en Merlo) y Luján, ya se inspeccionaron.

Este miércoles, por orden del juez Ariel Parrillis se realizó un allanamiento en Villa Mercedes, luego de un nuevo dato que recibieron los investigadores. En el lugar secuestró un teléfono celular y se recepcionaron tres testimoniales.

“Nosotros hemos ofrecido un psicólogo forense de Buenos Aires que tiene mucho prestigio, pero estamos esperando una respuesta de la fiscal”, dijo Héctor Zavala, abogado del padre de la nena, en declaraciones a El Chorrillero, para referirse a lo más reciente. Con ello pretenden sumar, como perito de parte, un profesional que brinde un informe aparte del que ya realizó el cuerpo auxiliar profesional sobre la Cámara Gesell, a los niños que estuvieron en los minutos previos a la desaparición de Guadalupe.

A lo largo de los 60 días que Guadalupe falta de su casa, la familia hizo más de 10 marchas y también se organizó para repartir panfletos por la ciudad con el rostro de la niña y sus características físicas. Los moviliza la fe, no se pueden quedar con los brazos cruzados y por eso salen a la calle. “No dejen de compartir la imagen”, solicitan una y otra vez.

Que no encuentren nada, que ningún dato “sea de interés para la causa”, es alentador para los padres, abuelos, tíos y primos que la quieren de vuelta “sana y salva”.

“Mi corazonada es que mi hija está viva”, dijo Eric Lucero cuando se cumplió un mes y marcharon desde la Plaza Pringles hasta el Poder Judicial. Allí, por primera vez el papá transmitió la preocupación porque “el Gobierno” ya no le daba “la misma difusión” al caso.

Lo más relevante de los últimos 30 días

El 17 de julio, Susana Trimarco (la mamá de Marita Verón, víctima de una red de trata) cuestionó a la investigación que: “Muchas cosas se hicieron al tun tun, hacer por hacer”.  También habló de errores, y dijo que pudieron ser por “falta de experiencia en este tipo de situaciones complejas”.

“Me preguntan a mí cómo hacer. Les digo así, así y así. Les explico las cosas. Para que esto tenga un final feliz tenemos que trabajar en conjunto, con la verdad, para que la chiquita tenga justicia”, agregó.

El 19 de julio se busca por primera vez en los parques industriales, Norte y Sur, de la ciudad capital, pero no encontraron nada.

El 21 de julio, una marcha llegó hasta la Jefatura Central de Policía donde pidieron que “no dejen de buscarla”, y el mismo día empapelaron la sede del Partido Justicialista. “Señor gobernador su mejor campaña política sería encontrar a Guadalupe”, pidieron los familiares más cercanos.

El 22 de julio la Policía allanó tres propiedades al costado de la Autopista de las Serranías Puntanas (a la altura del kilómetro 790), en las inmediaciones a la Escuela Técnica Agraria “General San Martín”. Ese día en los procedimientos estuvo la fiscal Virginia Palacios. Secuestraron una computadora y un profiláctico.

El 23 de julio repitieron una panfleteada en todos los barrios del sur, donde la vieron por última vez. En esa oportunidad el padre volvió a quejarse porque los avisos en las páginas oficiales ya no se veían: “Ya no buscan como antes”.

Ese mismo día se buscó en los desagües pluviales de la ciudad, y se amplió el rastrillaje hacia el sector oeste del Río Seco.

El 25 de julio (36 días después de la desaparición) la Policía confirmó la llegada de equipos de geo radares de Gendarmería Nacional, además de 8 buzos y un robot acuático para agilizar el trajo en los diques de la provincia. La incorporación del recurso tecnológico y humano fue a instancias de un pedido que hizo ante la Justicia Federal el equipo de abogados de la Fundación María de los Ángeles (de la cual Trimarco es la presidenta), que tomó la defensa de Yamila Cialone.

“El ministro de Seguridad (Luciano Anastasi) debería pedirles perdón a los padres por el tiempo transcurrido”, fue la posición que fijó Héctor Zavala. Cuestionó al funcionario por “la incapacidad demostrada” desde que se inició la investigación.

Tuvo en cuenta que las falencias fueron “políticas” y que desde el momento de la desaparición “debieron haber incorporado a Gendarmería Nacional”, por las herramientas y el personal capacitado en la búsqueda de personas con el que cuenta.

Casi al mismo tiempo, la coordinadora del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu), María Leticia Risco confesó que el caso es el “más difícil” al que se han enfrentado desde la creación del organismo, en 2010.

Con el arribo de Trimarco a la provincia se hicieron pedidos para que intervenga la Justicia Federal, y se trabaje bajo las sospechas de un supuesto caso de trata de personas. Hasta acá, todavía no hay información concreta sobre cuáles líneas se avanza para develar el misterio.

Repercusión mundial

En agosto, las redes sociales le dieron impulso a la búsqueda. A través de la iniciativa de Red Solidaria, la imagen de Guadalupe llegó a los programas de televisión nacional y el objetivo de que la vea todo el país se logró.

El 3, Marcelo Tinelli pidió por la aparición y la carita de la pequeña sanluiseña ocupó la pantalla grande del estudio. Al otro día, el mismo mensaje se replicó en el clásico entre Boca y River por Copa Argentina. Por Twitter y por Facebook se hizo una cadena, y los equipos más grandes del fútbol argentino se hicieron eco y compartieron. También lo hicieron algunos cantantes, entre ellos Sebastián Yatra y Leo García. Desde Francia replicó Wanda Nara.

El 5, el pedido llegó a los Juegos Olímpicos, donde debido a la importancia de las competencias interdisciplinarias los ojos del mundo miraban allí.

Para el sábado 14 se confirmó una nueva movilización que cruzará los límites provinciales. En San Luis el punto de concentración será el Correo Argentino, a las 16:30. En Buenos Aires se reunirán en la puerta del Congreso. En Córdoba y Mendoza también habrá movilizaciones.

La familia también impulsa una serie de murales que comenzarán a pintarse en diferentes puntos de la ciudad, tanto en lugares autorizados por la Municipalidad, como en otros de propiedad privada donde también tienen el permiso.

Como si se la hubiera tragado la tierra: Guadalupe desapareció una tarde de pleno invierno puntano, en un barrio donde la mayoría de los niños están acostumbrados a jugar en las calles de tierra o de asfalto; en esas zonas donde no hay cámaras de seguridad, y donde las luces (del alumbrado público) casi siempre fallan. Había poca luz, hacía mucho frío y no era un día cualquiera. Jugaba la Selección de fútbol, contra Chile, por la Copa América, el primer dato que explicaba por qué a esa hora todo el vecindario estaba frente al televisor.

Ese no era el barrio de Guadalupe. Había ido al cumpleaños de su tía madrina, en la manzana “H” del 544 Viviendas. De los testimonios se sospecha que la raptaron mientras jugaba a la escondida con su primita de 3 años.

A la vuelta hay un descampado con salida directa a la Autopista de las Serranías Puntanas ¿Pudo ser esa la vía de escape de un supuesto secuestrador? Solo forma parte de las hipótesis. En Mendoza y en San Juan se hicieron operativos pero en ningún lado encuentran rastros.