Los diputados del Frente Fuerza San Luis votaron todas las leyes del kirchnerismo

Los diputados nacionales rodriguezaístas en los casi 21 meses de gestión del cuarto gobierno kirchnerista han sido disciplinados miembros del bloque del Frente de Todos y no hay ningún indicio de que vayan a profesar otra fe en el futuro.

Las planillas de asistencia y de votación indican que Carlos Ponce, Victoria Rosso y Karim Alume nunca pusieron en riesgo el tratamiento o aprobación de un proyecto impuesto desde la jefatura del bloque por Máximo Kirchner. En el Senado, Adolfo Rodríguez Saá y Eugenia Catalfamo tampoco sacaron los pies del plato y se mueven bajo el mando de Cristina Kirchner.

Para muestra basta un botón

La subordinación de los legisladores rodriguezaístas no reconoce límites y lo demostraron al colaborar con la sanción de la Ley de Biocombustibles que perjudicó inversiones y puso en riesgo cientos de fuentes de empleo en la provincia.

Ponce, Rosso y Alume votaron a favor. Catalfamo también y Rodríguez Saá se borró del recinto a la hora de la votación. Así se posicionaron frente al nuevo marco regulatorio definido en la “Ley Máximo Kirchner”, tal como se llama a la norma porque se lo reconoce como el autor intelectual.

Los cinco rodriguezaístas también fueron funcionales a la estrategia del Gobierno nacional en el Aborto Legal. En algunos casos aprobando el proyecto y en otros sentándose en las bancas para dar quórum y habilitar el debate. Adolfo Rodríguez Saá con una pirueta escribió otra página de contradicciones: en 2018 se comprometió frente al anterior obispo a votar en contra la IVE y así lo hizo. En 2020 se ausentó para no votar.

El 29 de diciembre los diputados votaron el ajuste a los jubilados que incorporó una nueva metodología que no tiene en cuenta la inflación para calcular los haberes. De esa forma se dejó de lado la reforma previsional de 2017. Al día siguiente Ponce y Rosso formaron parte del grupo de 60 diputados que fueron a la Residencia de Olivos a brindar con el presidente.

Hay más. Este año aprobaron el nuevo Consenso Fiscal que autorizó a las provincias a aumentar los impuestos sobre los Ingresos Brutos y Sellos. En 2017 los legisladores rodriguezaístas no apoyaron el Pacto Fiscal que estableció una rebaja gradual de esos tributos.

“Ahora nos toca elegir quienes van a defender a San Luis en Buenos Aires…”, dice un párrafo de la carta del gobernador dirigida a los puntanos que circula por las redes sociales en la que pide el voto para los candidatos del Frente Fuerza San Luis. Es en definitiva la lista del Frente de Todos.

¿María José Zanglá, Eduardo Mones Ruiz y Natalia Zabala Chacur defenderán a San Luis si llegan a la Cámara de Diputados?

La respuesta es NO si se tiene en cuenta como vienen votando Ponce, Rosso, Alume, Catalfamo y el hermano mayor del gobernador.

Desde la oposición se advierte que votar al kirchernismo es darle un cheque en blanco para que tenga las manos libres.

Desde Juntos por el Cambio a nivel nacional y Unidos por San Luis en la provincia señalan que en esta elección hay que ponerle “un freno” al kirchnerismo.

Lo cuantifican señalando que el Frente de Todos está a siete diputados de tener el número mágico de 129.

Desde la oposición alertan que si el kirchnerismo alcanza la mayoría propia activará de inmediato una serie de leyes que en la actualidad están paradas porque no tiene el número suficiente.

El 18 de agosto la vicepresidenta, el presidente Alberto Fernández y el presidente de la Cámara Baja, Sergio Massa compartieron un acto en La Plata. En su discurso, Massa dijo que necesitan más legisladores y se lamentó: “Hoy no podemos imponer las iniciativas”. Desde el mismo palco la vicepresidenta sintetizó en una frase el sueño de perpetuarse en el poder: “La vida que queremos requiere no de uno, sino de muchos períodos de gobierno”.

El kirchnerismo quiere sacar, entre otras leyes, las reformas de la Justicia que están pendientes. Es un frente abierto si se tienen en cuenta las causas por denuncias de corrupción que comprometen a la propia Cristina

Rodríguez Saá necesita que voten a sus candidatos para tener dos diputados nacionales y contribuir a la hegemonía del kirchnerismo.