HOMICIDIO DE MÓNICA RAMOS
Martín Rodríguez: "Sufrí violencia simbólica, falta de respeto a mi mamá, ninguneo y abandono; te toman de pelotudo”
El hijo de la docente cuestionó a la Justicia de San Luis en la puerta de Tribunales. Este viernes se cumplieron 18 meses del asesinato de Mónica Ramos.
Familiares y amigos de la docente se reunieron este viernes desde las 9 en la puerta del Poder Judicial. Habían convocado a la comunidad para que lleve sus pedidos de justicia, una rosa o una vela para conmemorarla.
A Mónica Ramos la mataron adentro de su vivienda ubicada sobre calle Belgrano, en la ciudad de San Luis. El agresor le produjo unos 20 cortes en diferentes partes del cuerpo, incendió la propiedad y robó el auto de Ramos para escapar.
Pasó un año y medio, y todavía sus seres queridos no tienen respuestas. “Realmente con las perspectivas que hay uno se imagina 10 años haciendo esto, y es muy doloroso”, aseguró Martín Rodríguez en declaraciones a El Chorrillero.
Contó que el 31 de diciembre se cerró la etapa de instrucción, pero apuntó que “no debería haber sido así porque quedaron muchas cosas pendientes”. A partir de marzo la causa entró en una etapa probatoria.
“Una presentación que duró ocho meses y no entiendo cómo puede durar tanto. Los tiempos de ellos no son los nuestros y nunca los van a ser. A esta altura pedimos una respuesta humana porque mi mamá no merece esta situación de abandono”, subrayó Rodríguez.
Afirmó que es “una falta de respeto”, y que se sintió ninguneado: “Mi mamá militó 30 años en el partido que hoy gobierna la provincia y no recibí ni un saludo de nadie”.
Por el momento el único imputado por el hecho es Héctor Núñez, y cumple su prisión preventiva en el Servicio Penitenciario Provincial. Sin embargo, para Martín no todo se termina ahí: “La Justicia tiene un montón de obviedades en cuanto a las pruebas, investigación, ADN, los guantes, a lo que hicieron dentro de la casa de mi mamá y eso no lo hizo una sola persona, por lo que yo observe realmente no hay manera de hacerlo solo”.
Por último pidió celeridad, respuestas y responsabilidad. Dijo que sufrió “violencia simbólica, falta de respeto a mi mamá, ninguneo y abandono; y te toman de pelotudo”.
“No toman dimensión, es todo despectivo, una cuestión de mala persona y no le encuentro explicación”, cerró.
Leticia Rivero, amiga y compañera de trabajo de Ramos, estuvo presente en el Poder Judicial: “Mónica es una víctima como Guadalupe que se perdió y no hay respuestas, y como Lucas Bolotti que desapareció de la faz de la tierra del territorio puntano”.
“¿Qué está pasando con la Justicia?; ¿Por qué sigue en cuarentena?”, se preguntó.
“Todo se abrió hace tiempo, la gente volvió a trabajar, los comerciantes están peleándola día a día tratando de subsistir y tenemos jueces, fiscales y empleados de la justicia que aún no vuelven a su trabajo”, dijo al final.